Ex esposa, "Vamos a casarnos" romance Capítulo 115

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Jacob les abrió la puerta antes de que Ben los llevara al coche uno por uno.

Tras entrar en el coche, los niños vieron inmediatamente la figura de Odell.

Liam se sobresaltó un poco, e Isabel resopló y puso mala cara.

Odell los miró. Su rostro era tan duro e intimidante como siempre.

Isabel estuvo a punto de gritarle, pero decidió inmediatamente no hacerlo cuando se dio cuenta de la expresión que llevaba.

Liam lo observó con los ojos entornados.

Los dos niños se acurrucaron y se mantuvieron lo más lejos posible de su padre. Esta vez estaban visiblemente asustados por él y querían mantenerse alejados de él.

Odell frunció el ceño. "Siéntense".

Fijaron sus ojos perlados en él con expresiones tímidas y no movieron un músculo.

"No me hagan repetirlo otra vez".

Los dos intercambiaron una mirada.

Poco después, Liam se puso al lado de Odell, e Isabel siguió su ejemplo y se puso a regañadientes al lado de Liam.

Odell miró a los hermanos y extendió un brazo para cargar a Isabel. La levantó sin esfuerzo y la llevó junto a Liam antes de abrazarla finalmente.

Isabel hinchó las mejillas.

Se dio cuenta de que la expresión de su padre era un tono más oscuro de lo habitual. Temerosa de ser castigada, mantuvo los labios cerrados y sus puños cerrados se mantuvieron en la espalda de él en lugar de golpearlo como siempre lo hacía.

Odell la miraba fijamente.

Sus pequeñas mejillas parecían que iban a estallar como un globo en cualquier momento, y sus ojos ardientes parecían que iban a brotar chispas. Sus puños estaban apretados con tanta fuerza que se estaban poniendo rojos.

Estaba furiosa con Odell, pero no le pegó.

Odell se estremeció.

Incluso un niño de tres años comprendía la capacidad de su fuerza y sabía que debía soportar su rabia, así que ¿cómo era que aquella mujer no podía comprenderlo?

¿O acaso suponía que Tristán podría ayudarla a recuperar a sus hijos?

Con este pensamiento en mente, algo volvió a pasar por sus ojos.