Ex esposa, "Vamos a casarnos" romance Capítulo 149

Mientras tanto, detrás de los bastidores de la ceremonia de entrega de premios, un muro aislaba el ajetreo del exterior.

Simon llevó a Sylvia a su sala de espera.

Poco después, varias personas se apresuron a llamar a la puerta. Simon les abrió.

Uno de ellos se abalanzó sobre Simón y le preguntó: "Señor Aquila, el Amo Carter y Tara Avery están aquí. ¿Vamos a saludarlos?".

Simon se quedó perplejo y preguntó: "¿Tara Avery? ¿La que ganó la medalla de bronce este año?".

"Sí. Es la novia del Amo Carter. Ha sido muy famosa en la ciudad de Westchester estos años. El Amo Carter invirtió mucho en la industria del arte en la ciudad de Westchester gracias a ella".

Otra persona bromeó: "El Amo Carter también debe haber invertido mucho para conseguirle el premio de bronce".

Alguien le dio una palmada en el hombro de inmediato. "Vamos, no digas eso. ¿Y si Tara te oye?".

La gente se rio y se calló.

Simon frunció el ceño. Había visto el trabajo que ganó el premio de bronce este año. Parecía elegante, pero no era tan agradable estéticamente. El nivel de sus pinceladas tampoco estaba a la altura. Antes de enterarse de esto, ya sentía que había algo raro. Parecía que era debido a este famoso Amo Carter que Tara había ganado este premio.

Simon era el que más despreciaba este tipo de cosas, así que dijo sin rodeos: "Yo no voy. Ustedes pueden ir en mi lugar".

"De acuerdo", respondieron los asistentes y estaban a punto de marcharse. Sin embargo, a uno de ellos se le ocurrió algo de repente y se volteó hacia Simón. "Por cierto, señor Aquila, he oído que Sunflower vendrá también. La ceremonia de entrega de premios empezará pronto. ¿Está ya aquí?".

Simon echó un vistazo a la sala que tenía detrás y respondió con una sonrisa: "Sí. Lo verás cuando se entreguen los premios más tarde".

Sylvia lo esperaba con impaciencia.

...

En la parte delantera, en medio de la primera fila debajo del podio, un grupo de personas se reunió durante un largo rato antes de dispersarse de vuelta a sus respectivos asientos.

Odell se sentó en su silla con elegancia.

Tara se sentó a su lado con la barbilla levantada y una sonrisa de felicidad en la cara. Le gustaba estar rodeada de gente así. Sobre todo le gustaba ver los ojos de los que estaban celosos de que ella pudiera sentarse al lado de Odell. Podía ver que los demás premiados no estaban satisfechos con ella, pero con Odell cerca, ¡tenían que aceptarlo aunque no estuvieran dispuestos!

Después de que la multitud se dispersara, la persona encargada de la entrega de premios se dirigió al podio y habló por el micrófono para dar comienzo a la ceremonia. "Muchas gracias a todos por venir. En primer lugar, me gustaría presentar el programa de esta entrega de premios de hoy...".