Evelyn siguió a Renzo al salir del aeropuerto.
Por alguna razón, se sintió un poco decepcionada.
Renzo no mostró ninguna sorpresa, ni siquiera un poco de asombro.
Sin embargo, Evelyn se dio cuenta de que Renzo caminaba un poco más rápido de lo normal.
Entonces, ¿estaba ansioso por volver a casa?
El auto privado de Renzo ya estaba esperándolo fuera del aeropuerto.
Sin embargo, Renzo le dijo al conductor Diego: "Dame las llaves del auto, voy a conducir yo. Tú toma un taxi de regreso."
Diego salió del auto, y Renzo se sentó en el asiento del conductor.
Evelyn abrió silenciosamente la puerta trasera, preparándose para entrar.
"Siéntate adelante." Dijo Renzo de repente.
Evelyn obedeció, cerró la puerta trasera y abrió la del pasajero.
Murmuró para sí misma: ¿Qué diferencia hace dónde me siente?
Evelyn se abrochó el cinturón de seguridad, solo para encontrar que Renzo no encendía el auto, sino que la miraba con una mirada extraña.
Los ojos de Renzo eran profundos, como el mar en la noche, profundos y misteriosos, como si fuera a sumergirse en él con solo mirarlo.
Evelyn se sintió incómoda bajo su mirada, y preguntó: "¿Por qué me miras? ¿Tengo algo en la cara?"
Renzo respondió seriamente: "Sí, ven, yo te lo limpio."
Evelyn pensó que realmente tenía algo en la cara, así que se acercó.
Para su sorpresa, Renzo se inclinó y besó directamente los labios de Evelyn.
Este beso estaba lleno de emoción y dominio.
Evelyn incluso podía sentir el deseo de Renzo.
Sin embargo, Evelyn todavía se sentía timidez.
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