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*****Punto de vista de Louise******
Yo, Jacques Hart, Alfa de la manada Thunderclaw, por la presente te acepto a ti, Claire Greywood, como mi compañera". La voz de Jacques resonó en todo el salón mientras decía los votos con Claire.
Después de su coronación, se llevó a cabo la ceremonia de apareamiento. Yo, mi padre, Charlotte, David y Benjamin nos sentamos a los lados mientras todos los aplaudíamos al unísono.
"Hoy, ante la diosa de la luna, los proclamo a ambos como compañeros predestinados", dijo el anciano a cargo en voz alta y los aplausos llenaron todo el lugar. Por fin, Claire y Jacques estaban emparejados y era hora de tomar el control de su manada como Alfa y Luna de la manada.
Todos se pusieron de pie para felicitarlos por su unión y sus posiciones en Fangoria.
Charlotte y yo nos acercamos a Claire y la abrazamos en grupo, aunque la barriga de Charlotte aún no era tan grande, la barriga todavía era muy visible.
"Felicitaciones, niña. ¡Por fin estás emparejada!" Charlotte vitoreó emocionada mientras Claire nos sonreía.
"¡Es la mejor sensación del mundo!", respondió ella, riendo con las manos sobre los labios.
—Seguro que sí. —Asentí, confirmando sus palabras. Aparearse era una sensación maravillosa, pero con alguien que correspondía al amor que sentías por él.
Abracé a Claire nuevamente, haciéndole saber que estaba realmente feliz por ella.
"A partir de hoy me dirigiré a ti por tu título. Luna Claire", dije en tono de broma y una sonrisa apareció en su rostro.
"Suena un poco extraño, pero está bien. Luna Claire sonaría mejor".
Pusimos los ojos en blanco y, al final, asentimos.
—Saludaré ahora a Jacques —dije y me disculpé.
Me acerqué a Jacques, que estaba de pie con mi padre, mientras todos lo felicitaban juntos.
—Alfa Jacques —dije detrás de él y todos se giraron para mirarme.
Una sonrisa apareció en el rostro de Jacques mientras me abrazaba con fuerza.
—Eres una bruja —se rió entre dientes mientras me alborotaba el pelo. Le aparté la mano de un golpe y lo miré con enojo mientras todos se reían de mí desde atrás.
Les lancé miradas asesinas y los silencié en un instante.
—Louise, no seas así —me tranquilizó Jacques, frotándome el brazo y yo hice pucheros.
"Qué asco", se rió, "te ves tan raro".
Papá se acercó y se paró frente a nosotros y yo extendí la mano para abrazarlo. Una sonrisa se dibujó en mi rostro mientras me apartaba del abrazo.
—Ahora Jacques es un Alfa —dijo y sonreí, volviéndome para mirar a Jacques.
—Sí, se lo merece. Pero todavía tenéis mucho que explicar sobre por qué no es un Laurent.
—Ya te lo dijimos —Jacques frunció el ceño.
—No lo entendí la primera vez. —Puse los ojos en blanco y llevé las manos al pecho.
El vestido que llevaba puesto era el mismo que el gerente de esa tienda me había pedido que anunciara. Hasta ahora, he recibido muchos cumplidos y gente que parecía interesada en el vestido.
Mucha gente ya me había tomado fotografías esta noche.
"Te ves increíble esta noche", escuché de repente la familiar voz profunda que me había provocado escalofríos recientemente.
Me giré y vi a Benjamin de pie, con una pequeña sonrisa en su rostro, mientras me miraba de arriba abajo, admirando mi vestido.
Él tampoco se veía mal, su traje negro me hizo destacar entre la multitud mientras otros hombres presentes vestían trajes marrones o azules.
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