La Esposa de Lobo romance Capítulo 147

Mientras su destacada apariencia impresionaba a cada invitado que llegaba, también generaba una pregunta en sus corazones.

¿Quién era tan importante como para que Sonia esperara ansiosamente en la entrada principal ella misma?

Un tiempo después, un auto llegó a la entrada principal. Luna y Andrius bajaron del auto.

Sonia subió y los recibió con una brillante sonrisa.

"¡Señor Moonshade, Señora Crestfall, ustedes están aquí!" Sonia hizo un gesto e invitó a entrar. "¡Por aquí!"

Los tres entraron al hotel.

La escena sorprendió a todos.

¿Sonia los estaba esperando?

Luna era la hermosa CEO de Corporación Luna Nueva, y tenía bastante reputación en Sumeria, pero ¿Andrius?

Para el público, Andrius era solo un hombre sin nombre, entonces ¿por qué Sonia lo recibiría personalmente?

Aunque lucía bastante guapo después de usar el traje que Luna le compró, las apariencias no eran suficientes en la actualidad.

Sin embargo, había personas que vieron las noticias de la mañana, y cuando miraban a Andrius, sentían algo diferente en él. Esto generó una acalorada discusión entre ellos.

"Este tipo está bastante cerca de la Señora Timberland".

"¿Él es el tipo de la Señorita Timberland? Tsk..."

"¿Qué tiene él que la Señorita Timberland ve? Aparte de su altura y apariencia, y un temperamento bastante valiente, no es mejor que yo".

Los tres entraron al salón del banquete y se sentaron en la mesa.

Sonia y Luna charlaban sobre cosas de mujeres, desde cuidado de la piel hasta cosméticos y cómo dirigir una empresa.

Andrius agarró una revista militar y se perdió en su propio mundo. Sus pensamientos podrían haberse desviado hacia la revista, pero no hacia Sonia. A pesar de que ella charlaba con Luna, le echaba miradas de vez en cuando a Andrius.

De repente, se escuchó un alboroto desde fuera del salón.

Luego, Kevin entró con un gran ramo de rosas.

Se acercó a Sonia, se arrodilló en una rodilla y le entregó las rosas. La miró profundamente y dijo: "Sonia, desde la primera vez que te vi, me enamoré de tus hermosos ojos. Sé que nunca podré olvidarte. Desde ese día, he estado pensando en ti cuando como, cuando duermo; ya sea primavera u otoño, ya sea invierno o lluvia, todo lo que hago o dondequiera que vaya, pienso en ti.

"Sonia, te amo. ¡Por favor, cásate conmigo!"