La Esposa de Lobo romance Capítulo 477

Al día siguiente, una noticia se esparció como la pólvora por toda Sumeria.

¡El Rey Lobo, que había sido despedido oficialmente por Florencia, se había registrado para participar en la Gran Competencia Médica de ese año!

“¿El Rey Lobo quiere participar en la Gran Competencia Médica?”.

“Hay un rumor de que el Rey Lobo obtuvo sus habilidades médicas de un participante que estuvo en el primer puesto de la clasificación celestial en la Gran Competencia Médica anterior. ¡Él está haciendo su regreso para competir por el primer puesto y obtener el premio gordo!”.

“Las habilidades médicas del Rey Lobo no tienen igual. Se dice que cada vez que se pensaba que uno de los soldados de los Licántropos estaba al borde de la muerte, el Rey Lobo los salvaba, y que esto ocurrió una incontable cantidad de veces. ¡Es aterrador! ¡Es un competidor fuerte!”.

“¿Y qué? ¡Él ya no es el Rey Lobo!”.

“Sí, el Rey Lobo fue despedido y ya no tiene poder alguno. Él solo quiere regresar a través de la Gran Competencia Médica”.

Hubo una gran discusión al respecto en Internet.

Había sorpresa, emoción, anticipación y cinismo. Las opiniones eran variadas.

“¡Esto es grandioso!”.

Luna también vio la noticia y se emocionó tanto que casi saltó como una niña. Ella había perdido el contacto con el Rey Lobo desde su último encuentro.

Poco después, se había enterado de su despido, cosa que la había preocupado por mucho tiempo.

Pero en ese momento, parecía que el Rey Lobo seguía siendo el Rey Lobo. Aunque ya no estuviera al mando de los Licántropos, seguía estando a un nivel que innumerables personas no podían alcanzar, lo que le ganaba su admiración y asombro.

¡La mera noticia de su registro causó un gran revuelo y una gran discusión!

¡El Rey Lobo era el único capaz de tal hazaña!

Tal vez...

La Gran Competencia Médica le había permitido al Rey Lobo avanzar un paso más.

Luna se llevó el teléfono al pecho. Su hermoso rostro y sus ojos claros estaban llenos de anhelo y expectación.

Cuando ella pensó en la invitación de la Sociedad Médica, sus hermosos ojos se iluminaron. Ella decidió hacer una llamada. “Hola, soy Luna Crestfall de la Corporación Luna Nueva. ¿Es este el número de la Sociedad Médica?”.

“Hola, señorita Crestfall. ¿Cómo puedo ayudarle hoy?”.

Luna preguntó con esperanza: “Me gustaría preguntar el lugar y la fecha de la cena de celebración del proyecto para así ajustar mi horario mejor”.