La Esposa de Lobo romance Capítulo 533

Noelle se sobresaltó y vaciló. “Hay tanta gente. Podremos...".

Ella quería decir: "¿Podremos derrotarlos?".

Sin embargo, después de pensarlo, cerró la boca. Andrius era el Rey Lobo.

¡Andrius cargó hacia adelante y mató a cualquiera que se cruzara en su camino!

"¡Oh, no! ¡El Rey Lobo ha escapado!”.

"¡Rápido, informe esto al Mariscal Kabreh!".

"Oh, diablos...".

Después de que Andrius matara a varios secuaces, la conmoción alertó inmediatamente a todos los demás. Todos corrieron y rodearon a Andrius y Noelle.

Sin embargo, estos lacayos no eran rival para él. Andrius los enfrentó fácilmente con un puñetazo a cada uno.

Cuando mató a todos los guardias y asesinos, un grupo de soldados completamente armados apareció, rodeando a Andrius y Noelle. Los oscuros cañones de sus armas apuntaban a los dos.

"¡Rey Lobo, ríndete rápido!".

"¡Rey Lobo, no nos obligues a disparar!".

"Rey Lobo...".

Los soldados intentaron parecer valientes y miraron a Andrius con recelo.

Noelle estaba muy nerviosa. Tenía las palmas llenas de sudor.

"Ja...".

Los labios de Andrius se extendieron formando un arco como la sonrisa de la Muerte.

Al segundo siguiente, destellos plateados brillaron en la noche oscura y todos los soldados cayeron.

Entonces, Andrius huyó rápidamente con Noelle y desaparecieron en la noche.

¡Bam!

En la sala de mando, Kabreh se enfureció cuando recibió la noticia. Rompió la mesa en el acto y gritó: “¡Ve a transmitir mis órdenes! Haz que todos los soldados de las naciones se movilicen y rodeen las montañas cercanas”.

Ahora, ella era solo la seguidora del Rey Lobo. Ella había sido testigo de su gloria por sí misma.

Cada camino que conducía a la Montaña Camello estaba fuertemente custodiado por innumerables soldados.

Las antorchas estaban intensamente encendidas, iluminando la intersección como si fuera de día y haciendo imposible pasar desapercibido.

¡El número de personas que rodeaban la Montaña Camello podría ascender a cien mil!

Además, todos ellos eran tropas bien entrenadas. No eran simplemente personas normales que jugaban a disfrazarse.

Noelle había perdido la compostura y estaba preocupada.

"Las tropas no subirán por el momento". Andrius estaba muy tranquilo.

Noelle quedó atónita y preguntó: "¿Por qué no?".

"¡Porque ahora es tiempo de cazar lobos!".

Antes de que Andrius pudiera hablar, alguien respondió por él.