La Esposa de Lobo romance Capítulo 545

En la base de los Licántropos, los generales estaban llenos de justa indignación. "Rey Lobo, ¿qué hacemos ahora?".

“Rey Lobo, el emperador claramente tiene malas intenciones. ¿Por qué hiciste…?".

"Rey Lobo...".

Todos pudieron darse cuenta de que Registus estaba apuntando deliberadamente a Andrius.

Andrius miró a los ocho generales y les ordenó: “De ahora en adelante, todos ustedes se encargarán de los asuntos de los Licántropos por su cuenta. No se preocupen por mí. Todo quedará claro cuando la verdad sea revelada”.

Luego, él se fue sin esperar sus instrucciones.

Después de bajar del avión en Sumeria, Andrius regresó a la Empresa Celeste.

En la oficina del presidente, los ojos de Sonia estaban rojos. Se apoyó en el escritorio, pero no había rastro de vitalidad en ella. Era como si llevara mucho tiempo muerta por dentro.

La pantalla del portátil frente a ella todavía estaba encendida.

La pantalla mostraba la noticia de la muerte del Rey Lobo en la batalla en la Montaña Camello.

En ese momento, Andrius entró a la oficina.

“¿Señor Moonshade?”.

Sonia vio a Andrius y quedó atónita por un momento. Ella abrió la boca vacilante, se frotó los ojos con incredulidad y confirmó repetidamente.

¿Era Andrius?

¡Era él!

Sonia no pudo contenerse más mientras las lágrimas corrían por su rostro. "Señor Moonshade, realmente eres tú. Pensé que ya estabas…”.

“¿Ya estaba qué?”, preguntó Andrius.

"Velo por ti mismo".

Sonia no respondió y se limitó a entregarle la computadora portátil a Andrius.

Andrius lo miró.

Era el anuncio que hizo Registus, proclamando a todo el país que el Rey Lobo había muerto en una batalla fuera de la frontera occidental en la Montaña Camello y que se le daría el funeral de estado del más alto nivel.

La publicación ya había recibido millones de visitas y seguía aumentando. También hubo millones de comentarios. Todo el país estaba alborotado. Obviamente llamó mucho la atención de la gente.

"No le prestes atención a eso". Andrius cerró la computadora portátil y se la devolvió a Sonia. “No apareceré por un tiempo. Puedes gestionar Celestial Enterprise como mejor te parezca. En cuanto a otros asuntos, me ocuparé de ellos”.

Sonia no sabía lo que pasó.

Sin embargo, sabía que Andrius debía tener sus razones para hacer esto.

Lo único que tenía que hacer era gestionar bien la Empresa Celeste en su ausencia. Era como en la antigüedad cuando la mujer cuidaba la casa mientras el hombre salía a la batalla.

"Entendido". Después de saber que Andrius estaba bien, Sonia se sintió mucho más tranquila y asintió pesadamente.

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