La Esposa de Lobo romance Capítulo 578

Jane miró a Jesse y Rainbow con cara sonriente y levantó una taza de té, diciendo a Deacon: "Hoy es el compromiso de Jesse y Rainbow. A partir de hoy, somos familia. Por favor, cuida de nosotros en el futuro".

Los Hewitt eran más prestigiosos que los Crestfall en el pasado. Que Rainbow se casara con su familia era realmente ascender en la escala social y había esperanzas de que los Conery se renovaran. Lo más importante ahora era concretar el compromiso lo antes posible.

Por lo tanto, Jane estaba muy ansiosa.

"Por supuesto". Deacon asintió ligeramente. Aunque tenía una sonrisa en su rostro, era muy débil.

Los Conery...

A sus ojos, no eran más que basura. Nunca habría accedido a este matrimonio si no fuera por la felicidad de su hijo.

"En ese caso...". La sonrisa de Jane se hizo aún más brillante y casi se extendió de oreja a oreja. Le dijo a Rainbow: "Rainbow, rápido, sírvele un poco de té al Amo Hewitt. Después de todo, es tu futuro suegro".

Los ojos de todos se posaron en Rainbow.

Jesse vio su hermoso rostro y no pudo evitar sentirse acalorado, pensando que pronto tendría una prometida tan increíble. Dijo con entusiasmo: "¡Sí, Rainbow!".

Rainbow no parecía contenta. A ella le gustaban los hombres como Andrius, que se alzaban sobre todos, invencibles en la batalla y dominando el mundo, mirando a los héroes como si no fueran nada. Él incluso podía derrotar al Maestro de la Zona de Guerra del Sur en tres movimientos. Era el novio de sus sueños.

En cuanto a Jesse...

Aunque había nacido en una familia rica, no era nada comparado con Andrius. No había nada que comparar.

Así que se decidió, apretó los dientes y dijo en voz baja: "Jesse Hewitt, no me gustas y no quiero casarme contigo. Olvidémonos del compromiso".

En cuanto habló, todos los presentes en el gran salón se quedaron estupefactos.

La sonrisa de Jane se congeló al instante.

La expresión de Deacon también se ensombreció.

La cara de Jesse se torció en una de fealdad.

Los demás parientes de alrededor abrieron los ojos de par en par, mirando a Rainbow incrédulos como si estuvieran mirando a un tonto.

¿Sabía esta mujer lo que acababa de decir? ¿Sabía a lo que se estaba negando?

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