La Esposa de Lobo romance Capítulo 69

"El gigante dormido esconde su luz bajo el celemín".

Suletta se sorprendió porque era la primera vez que veía a su abuelo elogiar tanto a alguien.

¿Tan capaz era aquel hombre?

El anciano continuó: "Suletta, encuéntralo y usa todo lo que tengamos para llevarlo al poder".

Los que conocían al anciano se escandalizarían de sus palabras porque no era otro que Anthony Henderson, el hombre más rico de Sumeria. Una palabra suya podía cambiar la vida de la gente o acabar con ella. Podía fácilmente arruinar la vida de alguien o viceversa.

Él quería llevar a Andrius al poder no solo porque quería pagar la deuda.

Era viejo y su cuerpo ya no estaba sano. Si lograba entablar amistad con Andrius, tal vez no necesitaría desafiar la paciencia de la muerte la próxima vez.

Además, llevar a Andrius al poder era también una inversión para los Henderson. Si Andrius subía al poder algún día, los Henderson también se beneficiarían de ello.

Esta era la astucia del hombre más rico de la ciudad. Era capaz de prever lo que ocurriría en el futuro basándose en una cosa trivial.

Suletta asintió con respeto. "Abuelo, te prometo que lo encontraré".

Ya era tarde después del pequeño incidente. Andrius fue a buscar al Gordo Frank y quiso que volvieran juntos a la oficina.

Para su sorpresa, mientras buscaba al Gordo Frank, se encontró con un conocido. La persona estaba hablando por teléfono de cara a la carretera, y parecía agitada.

"Rechacé su solicitud innumerables veces, pero no tienen descanso. Me llamaron y querían que les diera una oportunidad. Incluso insinuaron un posible soborno. Qué ridículo".

Con eso, Marcus se dio cuenta de que su ira se había apoderado de sus modales. Se inclinó disculpándose y dijo: "Lo siento, Rey Lobo. No pretendía hacer ruido, pero es que no soporto a los Cloverfield".

Andrius agitó la mano y dijo con indiferencia. "No pasa nada. Hablando de los Cloverfield, ¿hay alguien llamado Axel en su familia?".

Marcus se sorprendió un poco. Preguntó: "Sí, lo hay. ¿Lo conoces?".

Andrius sonrió significativamente. "Podría decirse que sí".