El punto de vista de Theo
Soy muy bueno para recopilar información de personas y computadoras. Me convertí en una especie de investigador después de que mi pareja falleciera. Mi querida dulce Miranda, la muerte la tomó demasiado pronto de mis brazos. Miranda había estado involucrada en un accidente automovilístico el año antepasado. Era el este de Oregón en enero; las carreteras estaban resbaladizas y, finalmente, encontramos su camioneta volcado en una zanja de la carretera. La policía inicialmente trató de decir que creían que ella había golpeado a un animal, pero yo personalmente fui al lugar y no olí a ningún otro animal cerca de ella.
La parte delantera de la camioneta estaba destrozada donde ella golpeó la zanja, pero nadie pudo explicar por qué la parte trasera de su camioneta estaba destrozada. También señalé que parecía haber una transferencia de pintura, su camioneta era blanco, la pintura transferida era de color azul. Casi pierdo la cabeza discutiendo con la policía y los detectives porque necesitaba saber qué le había pasado al amor de mi vida. No llegué a ninguna parte con pedirles información. Fue entonces cuando decidí que iniciaría mi propia investigación.
No era demasiado inteligente cuando comencé, le pregunté sin rodeos a la gente si sabían algo. Poco a poco aprendí el arte de ser más discreto. Endulcé a la recepcionista, la llevé a cenar y comencé a obtener algunas respuestas. Luego entrené implacablemente durante la noche en el arte de piratear. Finalmente pude piratear las cuentas de correo electrónico personales de varios agentes que habían estado en la escena. Por sus correos electrónicos me di cuenta de que estaban ocultando algo, protegiendo a alguien. Profundizando, finalmente descubrí que el hijo del jefe de policía conducía una camioneta Ford Ranger azul.
Después de saber todo eso, no fue difícil que todos los demás detalles encajaran en su lugar. El niño había estado conduciendo borracho, ni siquiera vio a mi preciosa ángel hasta que la golpeó. Su coche giró varias veces antes de voltearse y salirse de la carretera. Se asustó y se fue y nunca llamó al 911. Mi Miranda, mi amor murió sola en el frío invierno de Oregón.
Regresando al presente pude entender completamente por qué mi Alfa estaba tan interesado en esta mujer. Él tiene una curiosidad natural y odia el engaño. Sin mencionar que estaba destinado y decidido a encontrar a esa joven lobo de esta mañana. Me alegra que esté obsesionado con ella, y espero que ella sea su pareja.
En el desayuno había una pequeña mujer rubia muy habladora que trató de coquetear con Caleb. Por supuesto, Caleb apenas la notó. Era joven y parecía que vivía en la Casa Señorial, así que la estoy buscando para encontrar respuestas sobre la misteriosa chica. Quizás si enciendo mi encanto, ella me dirá todo lo que quiero saber.
La veo en la sala de televisión de la Casa Señorial, hablando con dos chicas jóvenes que parecen tener más o menos su edad. Después de mirarla un par de veces y mostrar mi sonrisa, fácilmente despide a las chicas y se acerca a mí.
“Hola, soy Heather. Eres el Beta de Alfa, Caleb, ¿verdad?” Ella está girando su largo cabello rubio cuando comienza a hablarme.
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