Noela fue una de las actrices con más valor comercial de la industria del entretenimiento.
Por decirlo claramente, podía ganar dinero.
Aunque Pascual no estaba en la industria, sabía que muchas marcas le pedían a Noela apoyo, publicidad y promoción.
Con la ayuda de Noela, aunque el problema financiero de la empresa no pudo resolverse de inmediato, el asunto urgente pudo solucionarse.
—Ya sabes lo que quiero decir. Hoy es demasiado tarde. Hablemos de ello mañana —Noela estaba decidida.
Pascual no sabía por qué Noela había cambiado repentinamente de opinión. Se sorprendió, pero aun así asintió y respondió:
—De acuerdo.
Ya estaba en el callejón sin salida. En ese momento, no tenía ninguna razón para renunciar a esa oportunidad.
...
Era medianoche cuando Noela llegó a casa.
Después de una ducha, había una docena de mensajes sin leer en su teléfono.
Diez de ellos eran de Kadarina y unos cuantos de Apolo.
Noela leyó primero los mensajes de Kadarina.
—Noela, ¿estás en casa?
—¿Por qué no me respondes?
—Apolo acaba de llamar.
—Di algo, por favor. ¿Qué estás haciendo?
—¿Crees que este camisón se ve bien?
—...
Al principio, Kadarina le preguntó si había llegado a casa. Más tarde, dijo algo más.
—Estoy en casa. El camisón no te queda bien.
Después de responder a Kadarina, leyó los mensajes de Apolo.
—A punto de ir a casa.
—¿Quieres cenar?
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