Me entrego al diablo romance Capítulo 214

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POV de Damian...

-¿Es ella tu novia, Sr. Knight?

Un hombre frente a mí preguntó mirando fijamente a Rose.

-Sí, lo es...

No sé por qué dije eso, definitivamente no es mi novia, pero la idea de que este idiota se acerque a ella o muestre interés en ella no me sentó bien, no me gustó, no me preguntes por qué...

Mi respuesta grosera fue suficiente para que entendiera que ella no está disponible.

Aparté la mirada de él hacia Rose, que seguía bailando con Samuel, se veía hermosa, su rostro se veía tan tranquilo e inocente, pero maldición, la gente tiene razón, no juzgues un libro por su portada, esta chica es como una tormenta. Nunca en mi vida habría pensado que contrataría a una guardaespaldas femenina, pero es increíble. Y en algún lugar de mi corazón sé que no me arrepentiré de mi decisión.

Caminé hacia su dirección...

-¿Puedo recuperar a mi chica?

Bueno, en realidad no estaba preguntando...

Samuel me sonrió y se fue, dándome la mano de Rose. Puse mis manos en su cintura, su cuerpo se tensó ligeramente pero no mostró ninguna expresión en su rostro, maldita sea, es muy buena ocultando sus emociones...

Vaciló antes de envolver su mano alrededor de mi cuello, en los últimos dos días entendí que ella solo me ve como su jefe, nada más. No se lanzó sobre mí como dijo Jack, ni habló tonterías cuando estábamos solos en mi oficina, ni siquiera ahora está haciendo contacto visual conmigo, claramente muestra que está incómoda con mi cercanía. Mis labios se curvaron en una sonrisa mirándola, mi hermosa pequeña guardaespaldas... interesante...

-Parece que olvidaste por qué estás aquí conmigo, Rose, fuiste irresponsable...

Estaba buscando algún tipo de expresión en su rostro debido a mis acusaciones, pero no encontré nada...

-No lo fui, te estaba vigilando...

Dijo balanceándose conmigo al ritmo de la música, su cintura se movía en ritmo, maldición... sus curvas son tan perfectas que estoy tratando de no pasear mis manos por su cuerpo, su aroma a vainilla llena mis fosas nasales, provocando todos mis sentidos racionales...

-¿Por qué debería creerte?...

Pregunté girándola...

Me miró y respondió con su voz monótona...