Camila creía que la relación entre Lorenzo y su padre era como si etuviera extremadamente congelada con el hielo de miles de años según lo que mencionó Lorenzo.
Pero cuando se enfrentó a Raúl varias veces, pudo sentir claramente que su amor por los dos hijos era el mismo, pero su expresión era diferente.
Fue porque se preocupaba por sus hijos, así que cortó la relación entre ella y Lorenzo sin ninguna indecisión.
Ahora que ya supo que era la hija de Eva, estaba dispuesto a dejarla ir.
Pero la verdad era que Frida significaba más para él que ninguno de sus dos hijos.
Camila siempre pensó que Raúl nunca se enamoraría de ninguna mujer en su vida, no importaba cuán buena fuera una mujer, para él, era un accesorio después de todo.
Pero ahora, supo que estaba equivocada, escandalosamente equivocada.
Su obsesión por Frida siempre había sido muy profunda y estaba muy arraigada hasta llegar a los huesos.
La mujer que Raúl amaba en su vida era Frida.
Pensándolo detenidamente, Frida y Raúl no se había visto en décadas.
En ese momento, los dos estaban muy decididos a separarse.
Camila no tenía forma de saber qué les sucedió a los dos, resultó que se separaron tan decisivamente.
¿Qué tipo de amor profundo hizo que Raúl no pudiera dejar esta relación hasta ahora y había estado esperándola con locura?
Si no volvería atrás, ¿por qué no se olvidaba?
Si supo lo que pasó hoy, ¿por qué hizo tal cosa en el pasado?
Pero... ¿realmente fue su madre quien se llevó a su mejor amiga Frida?
Dadas las circunstancias en ese momento, ¿había alguna posibilidad de que Frida sobreviviera?
Dado que el señor Cambeiro amaba profundamente a Frida, ¿cómo se explicaba lo que le pasó a Sandra?
Ninguna mujer aceptaría el asunto de que dos hermanas se casaban a un hombre al mismo tiempo, a menos que esta mujer no amara a su marido en absoluto.
O tal vez los dos eran matrimonio puramente comercial.
Pero obviamente este no fue el caso entre Raúl y Frida.
Camila no había oído más sobre Frida de Lorenzo y no se atrevía a preguntarle.
Sin embargo, aceptaría todo lo que pasó si esto fue la designación del destino.
Sabía que Raúl conocía a su madre, por lo que ya le encendió la chispa de esperanza.
Camila no sabe mucho más sobre su madre que los extraños.
Eva siempre había sido muy discreta, incluso frente a su propia hija, no le hizo saber sus grandes logros. Lo que hizo todos los días era cuidar bien a Camila y enseñarle todas las habilidades.
«¿Pero de qué país es mi madre? ¿Qué tipo de familia es la de madre? ¿Quién es mi padre biológico? Todas las respuestas están esperando a que las encuentre una por una. ¡Y la clave para resolver el rompecabezas está en Fretston!»
El teléfono celular de Camila sonó, devolviendo sus pensamientos errantes a la realidad.
—Oye.
Los dedos delgados de Camila abrieron la pantalla y su voz era dulce.
—Camila, te he estado buscando durante mucho tiempo, ¿dónde estás?
La voz de Daniel estaba un poco preocupada.
—El paisaje nocturno es hermoso. Disfruto del paisaje nocturno en la terraza. ¿Terminaste?
Abrió la boca con una sonrisa.
—Sí, ya terminé. Iré a la terraza a buscarte. Tendré algo para ti.
Los dos terminaron la llamada.
Después de unos minutos.
—Camila, ¿tienes frío quedándote aquí?
Daniel caminó con gracia hacia la dirección donde estaba parada Camila, con un pequeño y delicado tazón en la mano y una pequeña cuchara en el tazón.
—Pruébalo, el budín que acabo de aprender del chef, espero que te guste.
Se detuvo frente a Camila y le entregó el exquisito tazón pequeño que sostenía a Camila.
—¡Es muy dulce! Es dulce pero no empalagoso. En cambio, tiene una fragancia única de flores de loto. Si un día no te dedicas a la medicina y abres una tienda de postres, también puedes pararte en la cima de la pirámide.
Camila le elogió tanto y el sabor de la postre era realmente delicioso.
—¡¿De verdad usas un tazón tan caro para hacer pudín?!
Después de que terminó de comer el budín, se sorprendió al descubrir cuán diferente era este tazón.
¡Resultó ser una preciosa porcelana de azul y blanco del horno oficial de la dinastía Qing!
El cerebro de Camila estaba zumbando.
—Está bien si te gusta. Si no te gusta, no importa cuán precioso sea, no tiene valor.
Daniel miró a los ojos de Camila, como el próspero y delgado cielo estrellado de medianoche, elegante y gentil.
—Acabo de ver a mi padre irse de aquí. Él... no te avergonzó, ¿verdad?
Esto era lo que realmente le preocupaba.
Después de todo, él había estado en la casa de las flores...
De hecho, Daniel tenía más cosas que quería preguntar, pero su razón le decía si creía en ella, nunca la preguntaría.
Si no pasaba nada entre ella y su hermano, preguntarla sería una humillación para ella.
Si algo sucedía entre ella y su hermano que él no quería saber, se lastimarían mutuamente.
Después de todo, Camila era de hecho la esposa de Lorenzo, incluso si se borrara la memoria de Lorenzo, no cambiaría el hecho.
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