Cuando Aubree lo oyó, el corazón le dio un vuelco y sintió que el mundo le daba vueltas.
Pippa se sorprendió y sujetó el teléfono con fuerza en la mano. "¿Cómo de grave?". Su voz tembló.
"Sigue en la sala de urgencias. El médico me pidió que te llamara y dijo que estuvieras preparada, que podría no..."
Pippa se sintió débil y su rostro se volvió espantosamente pálido. Entonces, el hombre continuó: "Puede que no lo consiga..."
"Ya veo..." con lágrimas, murmuró, "Estaremos allí enseguida. Llámenos si hay algo..." Luego, colgó el teléfono.
No podía soportarlo. Como Ivan...
Intentó calmarse. Cuando Pippa miró a Aubree, la vio retroceder tambaleándose con la boca abierta y los ojos vidriosos.
"¡Señora!" Pippa se apresuró a apoyarla, "¡Señora!"
Aubree se las arregló para no caer. Estaba abrumada y sentía que le costaba respirar.
Cuatro ojos llorosos se cruzaron. Ambas estaban conmocionadas.
"Iván..." Aubree trató de reprimir el malestar que sentía: "¡Nos vamos a Nueva York! Trae el helicóptero aquí!"
"De acuerdo, voy a hacer una llamada telefónica ahora". Después de asegurarse de que Aubree podía quedarse quieta, Pippa fue a hacer una llamada.
En ese momento, un Bentley rojo estaba aparcado en el patio y Linda salió del asiento del conductor. Fue a abrir la puerta del asiento del pasajero para Catherine. "Sra. Collins".
Ayudó a Catherine a salir del coche con el álbum de fotos en las manos.
Después de que Pippa hiciera la llamada telefónica, regresó junto a Aubree y vio entrar a Linda y Catherine.
"Tía Aubree". Catherine llevaba el álbum de fotos en la mano y con una sonrisa en su pálido rostro. Pero cuando vio a Pippa sujetando a Aubree, que obviamente no tenía buen aspecto, preguntó: "Tía, ¿estás bien?".
Como si se hubiera asustado, el rostro de Aubree se cubrió de miedo.
"Tía..." Al verla así, Catherine se llevó un susto. "¿Qué pasa? ¿Ha pasado algo?"
Aubree se giró lentamente para mirarla y dijo con voz temblorosa: "Iván tuvo un accidente de coche. Fue grave y él... podría morir..."
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