Mi Ex-esposa Misteriosa Es Multimillonaria romance Capítulo 683

Capítulo683

Mientras estuviera feliz Clara, Alejandro podría seguir llamando.

-Alejandro, ¿tienes algún problema de salud? – Clara ya no pudo soportarlo más y se sintió muy

avergonzada por él. -Si te digo que sigas llamando, ¿lo harás? ¿Aún te importa tu dignidad?

-No me importa mi dignidad, solo me importas tú- respondió Alejandro.

Con esas palabras, Alejandro lentamente giró su cuerpo hacia ella, haciéndola enfrentarse a él.

Sus miradas se encontraron y Clara pudo ver las emociones ardientes en los oscuros y bellos ojos

de Alejandro, quemándola con una pasión abrasadora, como si temiera que ella no pudiera verlo.

-Alejandro- susurró Clara con los labios entreabiertos. “Antes de que pudiera decir más, Alejandro

sacó su corbata y la colocó frente a ella.

-Clara, ¿me llevarías a casa? – dijo Alejandro.

Clara miró fijamente la corbata, sintiéndose completamente abrumada en el aire cargado de

tensión. Alejandro tenía la garganta apretada mientras mantenía su mirada fija en los labios rojos

y húmedos de ella, inclinándose ligeramente hacia adelante.

Las miradas se volvieron borrosas cada vez más, y los latidos del corazón se tornaron

incontrolables. Inoportunamente, jel teléfono móvil sonó en ese preciso momento!

Clara se alejó abruptamente de Alejandro y contestó la llamada.

-¿Aarón? ¿Qué pasa? – preguntó Clara con urgencia.

-¡Señorita, ¿dónde está usted?!- Aarón sonaba nervioso y apresurado al otro lado.

-Estoy en el hotel, ocupada con algunas cosas. ¿Qué ha sucedido? – preguntó Clara con voz tensa.

ocultar, y eso solo empeorará la situación

-Lo entiendo. Ahora mismo iré a buscar a Luz y a Inés Tú enviame de inmediato toda esa

información negativa y rastrea la fuente de donde se originó- dijo Clara, con la gran ira en su

interior, mordiéndose los labios con gran indignación. Quiero saber quién está detrás de esto, y

esa persona pagará un alto precio.

Los videos y fotos llegaron. Clara abrió su aplicación de mensajería y miró fijamente la pantalla Al instante, se llenó de furia y sus ojos destellaron con una ira abrumadora.

-Clara, ¿estás bien? – Alejandro estaba a punto de acercarse y preguntar, pero Clara estalló de

repente: ¡No necesito que te preocupes por mí!