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Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 1011

Fabiana claramente sintió el cambio en su expresión y aflojó los dedos que agarraban su manga, mirándolo con vacilación y llamándolo tentativamente: "¿Hermano?"

Esa palabra "hermano" logró traer un poco de razón a Lorenzo.

Suavizó toda su frialdad, y al mirar a Fabiana de nuevo, su expresión ya se había calmado.

"Sí," asintió, "¿no vino a casa hace unos días? Por preocupación de cometer otro error, pedí hacer una prueba de paternidad primero. El resultado demostró que ella no es Amanda."

"Pero, ¿no estaba ella en desacuerdo en ese momento?" Fabiana frunció el ceño.

Lorenzo la miró: "¿Cómo lo sabes?"

Recordaba que Fabiana ya se había ido en ese momento.

"La Sra. Cintia me lo dijo." Fabiana mantuvo su expresión natural, viendo la duda en los ojos de Lorenzo, rápidamente se explicó, "Como los abuelos no han estado muy bien de salud recientemente y no quería molestar visitando, estaba preocupada por ellos. Sabiendo que la Sra. Cintia es cercana a nuestra familia y no conozco a otras personas, solo podía preguntarle por los abuelos. Entonces, surgió ese tema, mencionó que Amelia y Dorian no querían hacer la prueba de paternidad."

"Al principio realmente no estaban de acuerdo," dijo Lorenzo, "pero dado que hubo confusión en este asunto antes, los abuelos y mis padres fueron más cautelosos. Insistieron en verificar el ADN primero para confirmar si ella era Amanda antes de reconocerla, así que usamos algunos métodos para hacer la prueba de ADN en secreto. Inesperadamente, ella tampoco era Amanda."

Tras decir esto, Lorenzo suspiró profundamente, pareciendo algo desconsolado.

Fabiana frunció el ceño, pensativa.

Lorenzo la miró: "No le digas esto a nadie, especialmente a la Sra. Cintia, después de todo, es la madre de Dorian."

"Oh," respondió Fabiana, "entendido."

Luego lo miró de nuevo: "¿Pero por qué viniste de repente hoy a pedir las cosas de Amanda?"

Lorenzo le mostró una sonrisa forzada, mirándola y preguntando, "Te he descuidado últimamente por asuntos de familia, ¿cómo has estado?"

Fabiana volvió a tener los ojos rojos: "No muy bien."

Su voz también estaba un poco ahogada, pareciendo muy afligida.

"Lamento haberte hecho sentir así," dijo Lorenzo, "¿qué planeas hacer ahora?"

Fabiana negó con la cabeza: "No lo sé, quiero ir a casa a ver a mi madre, pero estoy enredada en un juicio y no puedo dejar el país."

Fabiana continuó mirando a Lorenzo: "Hermano, ¿puedes ayudarme a pensar en una solución?"

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