Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 1048

Amelia también retiró su mirada y aprovechó que todavía tenía algo de tiempo libre para ocuparse de su trabajo. Le envió un correo electrónico a Ricardo, pidiéndole disculpas sinceramente, explicando sus inconvenientes y esperando poder reprogramar su encuentro para otra fecha o cambiarlo a una reunión virtual. Prometió que la próxima semana iría personalmente para hablar con él. Su correo estaba lleno de sinceridad, y una vez terminado, lo envió.

Sin embargo, hasta que Amelia y Dorian aterrizaron en Bariloche, no recibió ninguna respuesta de Ricardo. Al encender su teléfono, encontró una llamada perdida, todas de Sebastián. Amelia le devolvió la llamada.

"Amelia, ¿cómo va esa herida?" Apenas contestó, la voz amable de Sebastián se escuchó al otro lado del teléfono.

"Sí, mucho mejor, gracias Sr. Sebastián." Amelia agradeció educadamente. "Lo siento, mi teléfono se había quedado sin batería. Sr. Sebastián, ¿había algo que necesitaba?"

"Verás, desde ZJ, Ricardo está bastante satisfecho con tu propuesta de diseño y esperaba que pudieras volar a Maristela mañana para discutirlo en persona. ¿Crees que podrías encontrar un momento para ir?" Sebastián sonaba un poco apenado al hablar. "Sé que el itinerario está un poco ajustado y todavía estás herida, no debería ser tan precipitado. También pensé en hablar con Ricardo para pedirle unos días más, pero él está muy ocupado últimamente, solo tiene tiempo libre mañana por la tarde, y pasado mañana temprano tiene un viaje de negocios. No volverá en unos diez días o dos semanas. Está bastante contento con el diseño, por eso quiere cerrar el acuerdo antes de irse."

Dada la rara oportunidad de que Ricardo mostrara interés en firmar, Sebastián también esperaba cerrar el proyecto antes de su viaje de negocios. Después de todo, esperar otros diez días o dos semanas podría traer demasiadas variables. Si durante ese tiempo, ellos encontraran una mejor propuesta o cambiaran de opinión, habrían trabajado en vano. El Estudio de Arquitectura Sebastián había estado trabajando en este proyecto durante casi medio año, invirtiendo incontables recursos humanos y materiales. Sebastián no quería correr riesgos innecesarios.

Amelia captó la intención de Sebastián y se sintió un poco culpable: "Lo siento, Sr. Sebastián, tengo un asunto urgente en casa y realmente no puedo ir mañana. ¿Podría hablar con Ricardo para ver si podríamos cambiarlo a una reunión virtual?"

"El punto es que Ricardo tiene intenciones de firmar." Sebastián también se sintió incómodo. "Si es posible, podría incluso cerrar el contrato en el acto. Cambiar a una reunión virtual podría cambiar las circunstancias, ya sabes, no somos los únicos responsables de este proyecto."

"Pero..." Amelia también se sintió incómoda, echando un vistazo a Dorian, quien todavía estaba ocupado hablando por teléfono cerca. "Realmente tengo un asunto muy importante, no puedo ir mañana."

"¿Qué pasa?", preguntó Dorian.

"Nada." Amelia guardó su teléfono y le sonrió, "Vamos."

Dorian miró el teléfono en sus manos y asintió: "Está bien."

Él se adelantó para tomar a Serena de los brazos de Marta, y junto con Amelia, fueron a recoger su equipaje, listos para dirigirse al hotel. Sin embargo, apenas habían salido del aeropuerto hacia el vestíbulo, un gran grupo de periodistas armados con cámaras y micrófonos de repente rodeó a Dorian y Amelia. En un instante, Dorian colocó la cabeza de Serena contra su pecho, protegiéndola, y se posicionó frente a Amelia casi sin que se notara.