Amelia dedicó todo el día en Bariloche a Serena. Dorian todavía tenía algunos asuntos finales que resolver. Aunque el Hotel Esencia, a pesar de los inconvenientes, logró revertir su reputación y elevar el prestigio del Grupo Esencia a un nuevo nivel, el incidente reveló varios problemas. Por lo tanto, Dorian dedicó medio día a una reunión general con todo el personal para resumir en detalle los problemas expuestos por el Hotel Esencia y ajustar estrategias, siendo lo más importante los cambios de personal. Dado que la gerencia del Hotel Esencia casi causó un gran desastre por su engaño, Dorian desmanteló casi todo el equipo gerencial y colocó a un nuevo grupo de personas.
Reorganizar el personal es una tarea que consume mucho tiempo, y Dorian pasó toda la mañana trabajando en ello, sin tener tiempo para acompañar a Amelia y Serena. Amelia también estaba ocupada con su trabajo. Ese día, después de que ella solicitó al encargado de "ZJ", Ricardo, dos días más de margen y este la ignorara, no volvió a recibir ningún correo electrónico ni mensaje de su parte, parecía como si hubiera abandonado completamente el proyecto. Sebastián, el día que ella partió, la llamó especialmente para persuadirla sutilmente de darle prioridad al trabajo, pero luego no volvió a contactarla.
Su "deja eso, primero ocúpate de lo tuyo" llevaba un gran disgusto implícito. Amelia no sabía si después él había asignado a otra persona para manejar la situación o había puesto el proyecto en espera. Ella había enviado mensajes a Sebastián estos últimos días preguntando sobre el proyecto, pero Sebastián no respondió, probablemente estaba muy decepcionado con ella. Amelia se sentía profundamente arrepentida hacia Sebastián y el Estudio de Arquitectura Sebastián. Pero ese día, enfrentando la crisis del Grupo Esencia y Dorian, incluso si pudiera volver el tiempo atrás, ella habría elegido acompañar a Dorian de nuevo.
El diseño de "ZJ" había tardado casi medio año en decidirse, claramente no era un caso urgente. Si no fuera así, no lo habrían dejado de lado hasta ahora, dejándoselo a ella como un test para su permanencia en el puesto. Además, esos días realmente eran los que Sebastián había aprobado oficialmente como sus días de enfermedad, y ella había completado su trabajo durante ese tiempo. Darle prioridad a Dorian tampoco significaba descuidar su trabajo.
Pero, por más que lo pensara de esa manera, su sentido de responsabilidad hacia el trabajo no le permitía sentirse completamente libre de culpa, por lo que, una vez confirmado que no había problemas con el Hotel Esencia, Amelia envió otro mensaje a Sebastián preguntando sobre la situación del proyecto "ZJ" y mencionando que podría volar a Maristela mañana para hablar directamente con Ricardo. Pero, al igual que en los días anteriores, Sebastián no respondió a sus mensajes, y ella no sabía si ya estaba tan enojado que la había despedido. Aunque Amelia intentaba ocultar esta preocupación, Dorian notó su inquietud por la frecuencia con la que miraba su teléfono.
"¿Es por el trabajo?" Después de llevar a Serena desde la playa bajo la sombrilla, Dorian miró hacia Amelia y preguntó. Esa tarde, llevaron a Serena a la playa. La pequeña disfrutaba viendo el mar y jugando con la arena, y todavía recordaba la última vez que fue a la playa con Amelia y Frida Losada, por lo que insistió en ir desde temprano. Amelia acababa de pasar un buen rato construyendo castillos de arena con Serena y estaba descansando al lado, aprovechando para revisar si Sebastián había respondido sus mensajes. Al ver que Dorian la miraba, asintió y dijo: "No sé qué habrá pasado con el proyecto 'ZJ', el jefe no responde a mis mensajes."
"Un jefe que juega de esa manera con sus empleados no vale la pena." Dicho esto, Dorian extendió la mano para tomar el teléfono de Amelia. Amelia, creyendo que él iba a eliminar a Sebastián, rápidamente extendió su mano para arrebatar el teléfono: "¡Eh, no borres, no puedo dejar esto así sin más claridad!" Dorian la miró de reojo: "¿Quién dijo que iba a borrar?" Amelia: "......" Dorian echó un vistazo a las palabras "Sr. Sebastián" en su teléfono, con la punta del dedo tocó la pantalla, y directamente pulsó la llamada de voz.

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