"¿Pero y si papá tiene que trabajar, qué hacemos?"
Amelia se agachó frente a Serena, intentando desviar su atención, "¿Qué te parece si vamos al centro comercial?"
Pero la pequeñita, que estaba en plena etapa de obstinación y de fuerte autoconciencia, negó con decisión: "No."
Y puchereando dijo: "Quiero ir a buscar a papá."
Al final de su frase, su voz incluso se quebró ligeramente.
Amelia, con el corazón encogido, rápidamente la abrazó para consolarla y accedió a llevarla a buscar a su papá, lo que hizo que la pequeña sonriera de oreja a oreja.
"Entonces vamos a cambiarnos."
Tomando la mano de Amelia, se dirigieron hacia la habitación, rebosante de felicidad como si fuera Navidad.
Amelia vistió a Serena, y su alegría era tan evidente como si en verdad fuera Navidad.
Últimamente, debido al trabajo de Amelia, una lesión y asuntos con el Hotel Esencia, apenas habían tenido tiempo para estar con ella, salvo por el día anterior, casi no habían tenido oportunidad de salir juntas a divertirse.
Amelia no quería decepcionarla, así que después de vestirla, se dirigieron a buscar a Dorian, con Marta acompañándolas también.
La sucursal del Grupo Esencia se ubicaba en el distrito comercial de Maristela, también una zona muy concurrida de la ciudad, no muy lejos del Hotel Esencia, que se encontraba en la misma área ajetreada.
Amelia simplemente tomó un taxi para llegar.
Pronto, el coche se detuvo frente al edificio de oficinas.
Era la primera vez que Amelia visitaba el lugar.
El edificio era alto, y el Grupo Esencia solo había alquilado un piso.
Amelia no sabía exactamente en qué piso se encontraba la sucursal del Grupo Esencia, y como Dorian estaba ocupado trabajando, aparecer de repente con una niña podría parecer demasiado ostentoso y probablemente interrumpiría a otros, por lo tanto, al entrar al vestíbulo, Amelia le dijo a Serena: "Papá todavía está trabajando arriba, ¿qué tal si esperamos aquí abajo a que papá termine?"
Sacó su teléfono para consultar el mapa y se sorprendió al encontrar que la calle justo enfrente era donde se encontraba "ZJ".
No esperaba terminar tan cerca de la empresa por accidente.
"ZJ" estaba justo al otro lado de la calle, a solo cruzar y unos cien o doscientos metros de distancia, muy cerca.
Mirando a Serena, aún absorta en sus bloques de construcción, y a Marta, que la observaba pacientemente, Amelia pensó por un momento, se acercó y se agachó frente a Serena, diciéndole: "Serena, quédate aquí jugando con la tía por un momento, mamá va a ir al edificio de enfrente a resolver algo de trabajo, ¿te parece bien?"
Señalando hacia el edificio "ZJ", añadió: "Mamá tardará a lo mucho una hora, ¿está bien?"
Serena levantó la vista hacia el edificio de oficinas de enfrente, luego levantó la vista hacia el edificio donde trabajaba su papá, como si estuviera midiendo la distancia entre ambos. Después de meditarlo, asintió y dijo: "Está bien."
Luego añadió: "Cuando papá baje, iré con él a buscar a mamá."
"Está bien." Amelia le acarició la cabeza en señal de acuerdo, y luego se giró hacia Marta para darle algunas instrucciones antes de levantarse para irse.

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