Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 996

Amelia se sentía algo confundida, pero aun así, cortésmente le agradeció a Sebastián:

"Está bien, gracias, Sr. Sebastián."

"No hay de qué, primero recupérate bien y luego vuelves a la empresa." Dijo Sebastián, "En cuanto al proyecto de ZJ, déjaselo a alguien más por ahora…"

"Anoche ya hablé detalladamente con el Sr. Adrián de ZJ sobre los requisitos del proyecto." Interrumpió Amelia, "Hablamos profundamente y ya tengo una idea clara de lo que necesitan. ¿Qué te parece si aprovecho estos días de descanso en casa para elaborar el plan?"

"Claro que sí." Sebastián accedió sin pensarlo, incluso con cierta expectativa, "ZJ contactó a una docena de empresas para este proyecto, y se han presentado varias versiones de planes que han tomado casi medio año, y nadie ha logrado concretarlo. Este proyecto ya ha pasado por las manos de todos en el equipo de diseño, consumiendo mucho tiempo y esfuerzo sin superar sus expectativas, y al ser un cliente habitual, no queremos ofenderlos. Ya que tú puedes hacerlo, inténtalo."

"De acuerdo."

Amelia respondió suavemente, sorprendida de que el proyecto ya hubiera circulado por todo el equipo de diseño.

Sabía que era un tema espinoso, pero no imaginaba que fuera tanto.

"Cuando lo tengas, envíaselo a Martina y me pones en copia." Sebastián la instruyó.

Amelia asintió: "Está bien."

"Bueno, entonces no te molesto más, descansa y recupérate."

Dicho esto, Sebastián colgó.

Amelia también dejó el teléfono y al levantar la vista vio a Dorian mirándola, frunciendo levemente el ceño.

Dorian la miró un momento y finalmente, sin decir nada, levantó su mano y le acarició la cabeza, tardando un rato antes de decir lentamente:

"Amelia, no me opongo a que trabajes, pero quiero que te cuides primero."

"Sí." Amelia asintió firmemente, "No te preocupes, sé lo que hago. La razón por la que quiero seguir con este proyecto es porque ya tuve una charla profunda con el cliente anoche, y tengo algunas ideas preliminares y planes en mente, lo que me hace sentir emocionada y con expectativas. Así que quiero intentar plasmarlas. Pero de todos modos, mi salud es lo primero, y si realmente no puedo hacerlo, no me forzaré. No quiero que tú y Serena se preocupen por mí."

Su voz se debilitó al final, llevando un ligero tono de coquetería.

A ella todavía le resultaba difícil expresar sus sentimientos directamente, y al terminar, sus orejas se enrojecieron por la incomodidad, pero se esforzó por mantener el contacto visual con los oscuros ojos de Dorian, sin esquivar la mirada.

Dorian, claramente complacido por sus palabras ligeramente coquetas, finalmente relajó el ceño, extendiendo su mano para pellizcar suavemente su mejilla: "Has dicho tanto, ¿qué más puedo decir yo sino estar de acuerdo?"