Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1439

Además, él había puesto tanto corazón en su relación con Haila, incluso se había enamorado de ella, ¡y resulta que Haila confiaba en otros y no en él!

¡Incluso lo había bloqueado en WhatsApp!

Esto era una clara señal de que quería cortar todos los lazos con él.

¡No podía aceptarlo!

Si hubiera sido Verónica la que quería distanciarse, no le importaría tanto, ya que su interés en Verónica era meramente utilitario, interesado solo en su dinero. Pero Haila era diferente, no solo le interesaba su dinero, sino también ella como persona.

Finalmente, después de varios intentos, logró que le contestaran el teléfono.

—Haila, ¿podrías por favor dejar de ignorarme? Ahora el mundo entero parece estar en mi contra, nunca supe que tanta gente no quisiera verme bien, se burlan de mí constantemente, admito que te he engañado en algunas cosas, pero mi amor y cariño por ti son verdaderos. ¡En serio no concibo una vida sin ti, Haila! ¿Podemos vernos una vez más? Estoy en el mismo hotel, en la misma habitación donde me llevaste la primera vez, ¿puedes venir? Incluso si es para darle un final digno a nuestra relación, no debería terminar de la manera que terminó esta tarde, dame la oportunidad de explicarme.

Al momento de conectar la llamada, Lucas derramó todas estas palabras de una vez.

Su tono ansioso realmente sonaba como si estuviera desesperadamente enamorado de Haila.

Haila inicialmente quería colgar, pero por accidente contestó la llamada, justo había ido a ducharse y no llevó el celular consigo, y al volver lo escuchó sonar.

Pensaba colgar y luego bloquear el número.

Después de escuchar todo lo que Lucas había dicho, su rostro pálido se alivió un poco.

Si Lucas hubiera sido más honesto, admitiendo que estaba con otras mujeres mientras tenía una novia, quizás ella tendría una opinión diferente de él.

Pero hasta ahora, Lucas seguía actuando como si no hubiera hecho nada malo, todavía intentando engañarla.

Ella realmente lo despreciaba.

Creía que ella era tonta al punto de ser engañada una y otra vez.

—Lucas, olvidé decirte la última cosa esta tarde. —Dijo Haila con un tono especialmente calmado.

Los ojos de Lucas se iluminaron: —¡Dime!