Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1740

Ella tuvo una discusión y luego sintió que no valía la pena.

Después, simplemente reservó un boleto de avión y se vino.

Como en casa había empleados domésticos y una auxiliar especialista en niños, se sintió tranquila.

Durante el viaje de regreso, el mayordomo le estuvo informando sobre la situación de los niños.

En cuanto a Mauricio...

Ahora ella sentía que Mauricio quizás solo se preocupaba por el placer inmediato, sus propios padres incluso podían arreglarle tranquilamente citas con otras mujeres, haciendo que ella pensara tal vez que había viajado en el tiempo a una era pasada.

Siempre habían pensado que Mauricio estaba en buena forma física, capaz de tener varias mujeres al mismo tiempo. Ja, ja, ja…

Nunca consideraron que, si Mauricio tenía varias mujeres, ella no se quedaría atrás, los jóvenes de hoy en día eran tan atractivos, y ella, siendo rica, podría tener tantos como quisiera.

Al final, solo se lastimarían mutuamente.

Al ver el fuego de la ira en los ojos de Beatriz, Ana también se enojó: —¿Ellos son tan entrometidos?

Si no fuera porque los padres de Mauricio siempre estaban causando problemas, la relación entre Beatriz y Mauricio sería muy buena, ahora tenían tres hijos adorables, ¿por qué tendrían que estar siempre discutiendo y viviendo separados?

—Eso no es nada, hace poco una prima de Mauricio incluso arregló que una mujer sedujera a Mauricio, y alguien más lo drogó. No soy pesimista con todo esto, pero creo que bajo estas circunstancias, Mauricio no podrá mantenerse fiel por mucho tiempo. Planeo comprar algunas propiedades en el país y también voy a investigar las escuelas aquí, para estar preparada de antemano para lo que suceda. —Dijo Beatriz con calma.

Ella ya no era una joven de veinte años que creía que el amor podía con todo.

Si no se preparaba ahora, tal vez Mauricio podría encontrar a otra mujer en cualquier momento.

¡Ella no quería seguir con este juego!

Ana, sintiendo una mezcla de compasión y preocupación, dijo: —Cuando necesites ayuda, no dudes en decírmelo.

—¿Claro, entre nosotras? Si en algún momento necesito tu ayuda, no dudaré en pedírtela. —Respondió Beatriz.

A pesar de que la conversación no fue muy alegre, esto no impidió que Beatriz disfrutara con agrado de la comida.

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