Resumo do capítulo Capítulo 1784 de Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate
Neste capítulo de destaque do romance Segunda oportunidad Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate, Internet apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.
Ana miró con detenimiento para averiguar quién le había enviado la foto.
Al descubrir que era Tania, se enojó.
[Señora Ana, no te envío esta foto para crear conflictos entre tú y el jefe Alejandro, el afecto que el jefe Alejandro siente por ti es incomparable. Un amigo me pasó esta foto, la mujer que aparece se llama Regina, acaba de regresar del extranjero y está al frente de un proyecto que necesita discutir con el jefe Alejandro. Tenemos un amigo en común que mencionó que ella estaba interesada en el jefe Alejandro y buscaba por todos los medios cómo encontrarse con él. Solo quiero prevenirte sobre esta tal Regina, a quien muchos amigos llaman "rompecorazones".]
Tania mandó este mensaje desde un café en su pueblo natal.
En la ciudad A ya no podía hallar trabajo, a veces las noticias se esparcían tan rápido que, todos estaban al tanto de lo que le había ocurrido en el Grupo García.
Por eso tuvo que volver a su pueblo en busca de trabajo, y tras días sin éxito, decidió empezar a hacer videos cortos y subirlos a internet, intentando valerse por sí misma, lo cual de forma gradual la ayudó a ser más abierta y tranquila.
Así que, cuando vio a sus amigos en un chat grupal hablar sobre esto, vaciló por unos minutos antes de enviarle el mensaje a Ana.
Regina era más astuta.
Después de todo, era una hermosa mestiza, y mujeres de ese tipo escaseaban alrededor de Alejandro.
Regina poseía esa belleza que fácilmente podría enloquecer a cualquier hombre.
Y ella, tal vez con algunas intenciones nefastas, lo que no había conseguido ella tampoco quería que otros lo consiguieran, y además, Ana era de esas personas que, una vez que las conoces, no quieres que les vaya mal.
Quizás fue un acto de conciencia.
Tras decir eso, no añadió más al respecto, consciente de que no debía molestar más a Ana.
Y Ana, después de leer el mensaje de Tania, simplemente olvidó el asunto.
Llamó a Manuel para consultar sobre la situación.
—Manuel, ¿es sencillo resolver el problema que enfrentas ahora?
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