Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 21

'¿Qué es eso que lleva puesto?'

Dos tirantes finos que parecían romperse con un ligero tirón.

Cuando Ana se acercó, notó la expresión de desagrado en el rostro de Alejandro. ¿Será que piensa que no se ve bien y le está avergonzando?

A Ana le encantaba el atuendo y el maquillaje que el estilista había elegido para ella.

—¿No me veo bien así? —preguntó Ana finalmente.

Los ojos de Alejandro estaban llenos de una oscuridad capaz de devorarlo todo. Frunció ligeramente el ceño, mostrando su descontento. —Hoy en la subasta hay muchas personas de la alta sociedad. Con este atuendo, seguramente atraerás todas las miradas.

—Si realmente logro captar todas las miradas, no solo es porque soy hermosa, sino también gracias al estilista que el Sr. García contrató. Él proporcionó el vestido y el maquillaje. —Ana percibió el tono sarcástico en las palabras de Alejandro.

Eduardo, que estaba junto a ellos, quedó atónito.

¿No parecía que la señorita González estuviera interesada en su jefe?

Si realmente lo estuviera y Alejandro pensara que ella quería atraer a otros hombres, debería haberse apresurado a aclarar el malentendido, ¿no?

——

Dentro de la casa de subastas, mucha gente ya estaba sentada en los lugares previamente asignados por el personal.

Carmen y Diego estaban sentados en una esquina al fondo del salón.

Había mucha gente hoy, y se decía que los artículos en subasta eran verdaderas joyas de colección. Aunque no pudieran ganar ninguna puja, al menos podían aprovechar la oportunidad para ver algo extraordinario.

Diego había conseguido la oportunidad de asistir a la subasta gracias a una recomendación.

Carmen, al saber que Diego iba a la subasta, insistió en acompañarlo para ver de qué se trataba.

—¿Qué pasa, papá? —preguntó Carmen, viendo la reacción de su padre.

Diego estaba mirando a una pareja sentada al frente. El hombre era Alejandro García, y la mujer de espaldas se parecía mucho a la persona que le había arruinado el día.

—Alejandro García hoy ha traído una acompañante, y esa mujer se parece mucho a Ana.

—¿Acompañante? —Carmen miró en la dirección que su padre estaba observando.

Al ver a Alejandro, aunque solo era una vista desde atrás, sus ojos brillaron con admiración. A pesar de que todos los hombres llevaban traje, él se destacaba entre los demás.

Sin embargo, hoy había venido con una acompañante, y el vestido que llevaba esa mujer parecía ser el mismo que Carmen había querido comprar pero no pudo conseguir. La mujer tenía una espalda hermosa y una piel tan blanca como la porcelana, algo que cualquier mujer envidiaría.

Realmente, desde atrás, esa mujer se parecía mucho a Ana...