Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 368

Bryan se acercó.

Beatriz miró detrás de él y preguntó: —¿Te fuiste antes?

—Sí, me adelanté. Vamos, sube al coche —asintió Bryan.

Desde que vio a Beatriz, se sintió perturbado.

Sospechaba que ella podría dejarlo.

En ese momento, comprendió por qué parecía haberla olvidado últimamente.

Era como si subconscientemente no quisiera volver a su lado.

Beatriz no sabía lo que Bryan pensaba. Entre ellos flotaba una transformación, una sensación intangible.

Subieron al coche.

Beatriz tampoco habló. Realmente no sabía qué decir.

—¿Desde cuándo, cada vez que nos vemos, de repente no tenemos nada de qué hablar?

—He estado muy ocupado últimamente, ¿estás enojada? —preguntó Bryan de repente, tomando la mano de Beatriz.

Era suave y pequeña, cabía completamente en la suya.

Debía concentrarse más en ella.

No debería haber lastimado su corazón por nadie más.

Beatriz negó con la cabeza.

—No estoy enojada, entiendo que estás muy ocupado todos los días, es por nuestro hogar. Así que no, no estoy enojada contigo.

—¿Por qué te alejaste cuando me viste? Estamos casados, somos esposos. Cualquier cosa que suceda, deberías preguntarme, no suponer sin más. ¿Entiendes? —aconsejó Bryan con voz suave.

En ese momento, Beatriz ya no estaba enojada; solo sentía un vacío en su corazón.

Viendo a un Bryan que la miraba con seriedad y confianza completa, se sintió nerviosa.

¿Qué había estado haciendo durante todo este tiempo?

¡Es absurdo!

¡No puede perder a Beatriz! Si ella descubre las tonterías que ha hecho recientemente, ¡no lo soportará!

Llegaron a casa y después de charlar un rato, Beatriz se fue a ducharse y Bryan se dirigió al estudio y realizó una llamada.

—Mañana tramita tu renuncia, te daré una suma de dinero, desde ahora no quiero verte nunca más, y mucho menos que albergues otras ilusiones, lo nuestro es mejor que no se divulgue a nadie.

Las palabras que pronunció eran duras, cada palabra destilaba su despiadada resolución.

Leticia, al recibir la llamada, inicialmente se alegró de que Bryan la llamara, pero en el siguiente momento, quedó en shock y se le drenó el color de la cara.

Pensó que había escuchado mal.