Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 372

Al ver que en la sala del hospital solo estaba José, Gustavo preguntó: —¿Dónde está Carmen?

—Ella fue a ayudar a una amiga que tenía un problema. Yo también puedo manejar las cosas aquí con mamá solo,—respondió José.

Sergio mostró su descontento: —Mamá está en un momento crítico de su recuperación. ¿Qué amiga puede ser más importante que ella?

José frunció el ceño: —El mundo no gira solo alrededor de mamá. Después del incidente, Carmen ha hecho todo lo posible por cuidarla. No es necesario ser tan duro con ella. ¿Acaso ustedes no están también ocupados con sus propias cosas?

—Ya basta, no discutan en este momento,—intervino Gustavo, visiblemente molesto.

Miró hacia la cama donde Laura estaba durmiendo.

Esa mirada solo aumentó su frustración.

—¡Qué molesto! ¿Por qué últimamente hay tantos problemas en nuestra familia? Problemas en la empresa, problemas con mamá, mi trabajo tampoco va bien. Tenía varios papeles casi asegurados, y luego cambiaron de actor. ¡Ahora casi no tengo trabajo!—exclamó Sergio, expresando todas sus quejas.

Intentó contactar al director y a la empresa, pero no obtuvo respuesta, o le decían que no era adecuado o que debería tomar un descanso y mejorar sus habilidades actorales.

¡Mejorar qué!

José frunció el ceño: —Últimamente hay muchas cosas pasando en casa, y mi trabajo tampoco va bien.

—La empresa no durará mucho. Papá y yo estamos haciendo todo lo posible por encontrar maneras de mantenerla, y con las cosas de casa tal vez tengamos aún menos tiempo, así que ahora solo podemos pedir que Ana regrese,— dijo Gustavo con voz grave.

—¿No dijeron que ya habían pensado en una manera de hacer que ella regrese?— José ya estaba harto.

Tomando frecuentes permisos en la empresa para cuidar de su madre, y si fuera solo eso estaría bien, pero ella no solo está descontenta con él, sino también con Carmen.

Y la empresa también está descontenta con él.

Después de escuchar a los dos, José asintió: —Hagámoslo como dicen ustedes, no es que no le hayamos dado oportunidades, es que ella es muy irresponsable.

—Mañana dejaremos a una cuidadora con mamá, y nosotros iremos juntos a buscar a Ana. Con más gente, podremos presionarla más,—Gustavo decidió firmemente.

—De acuerdo.

En ese momento, Laura despertó.

Al despertar, parecía un poco confundida.

Al ver a sus tres hijos al lado de la cama, finalmente se dio cuenta de lo que había vivido.

—Acabo de tener una pesadilla terrible. No tratamos bien a Ana en absoluto, y ella tuvo un accidente de coche, peor que el mío, pero nadie la cuidó, dejándola a su suerte. Tuvo el accidente mientras intentaba salvarme, y yo la despreciaba como una carga. Después, después, todos sufrimos las consecuencias, ¡todos morimos trágicamente!