Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 744

Resumo de Capítulo 744 : Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate

Resumo de Capítulo 744 – Uma virada em Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate de Internet

Capítulo 744 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Segunda oportunidad, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.

¿Cuántos hombres ha tenido Ana?

Primero fue Alejandro, después Ignacio y ahora, ¿Salvador?

Observando cómo Salvador trata a Ana de manera amable y atenta, es evidente que sus sentimientos son sinceros, al igual que los que Ignacio tenía por ella en su momento.

De repente, Patricia sintió un asco y desprecio intensos.

¿Es que Ana, aprovechando su belleza, se mueve sin remordimientos entre diferentes hombres?

Cada vez que Patricia ve a Ana, percibe una mirada de rechazo en su rostro.

¿Acaso está enferma?

—Qué coincidencia, ¿ya has terminado de comer? —Salvador se sorprendió inicialmente, pero se recuperó rápidamente.

¿No es demasiada coincidencia? ¿Cómo es posible que al venir a un restaurante se encuentre con Patricia?

Con cierta arrogancia, Patricia levantó un poco la barbilla y preguntó: —¿Realmente es una coincidencia, o es que has cambiado de novia otra vez?

Ana arqueó una ceja, mostrando una frialdad en su mirada.

—No digas tonterías, Ana es solo mi amiga —se apresuró a explicar Salvador.

Estaba acostumbrado a ser malinterpretado con cualquiera, pero que malinterpretaran a Ana era diferente; para él, ella estaba envuelta en un halo sagrado, inmune a cualquier calumnia.

Patricia soltó una risa ligera, claramente incrédula: —¿Amigos?

Su tono era evidentemente escéptico y descreído.

—Podemos ser muy buenos amigos, ¿entendido? —Salvador sacó un cigarrillo y comenzó a fumar.

Si no fuera por el respeto hacia su amistad con Alejandro, en ese momento tendría el impulso de revelar el matrimonio de Ana y Alejandro. Patricia siempre ha mirado a los demás desde arriba, y ese tono despectivo al mirar a Ana simplemente le resultaba incómodo.

Ana habló con serenidad: —Voy a pedir la comida.

Al ver que Ana se dirigía a sentarse, Patricia frunció el ceño y dijo a Salvador: —Hace años que no nos vemos y sigues siendo un vividor. Me voy ahora, hay una fiesta en un yate en unos días, nos veremos allí. Pero no la traigas, no me cae bien.

—¿Sabías algo sobre la relación entre Ana y Alejandro? ¿La habías visto antes de hoy? —Salvador percibió la hostilidad de Patricia hacia Ana.

Patricia endureció su expresión: —Ella y Alejandro no durarán.

Tras decir eso, se marchó.

Patricia echó un vistazo a su teléfono móvil.

Esa mañana había seguido a un fotógrafo de X/Twitter.

Este fotógrafo había capturado imágenes suyas y de Alejandro que aumentaron su popularidad, y ella había contribuido un poco a eso.

Esta clase de notoriedad permitía que las personas cercanas la vieran.

Pero, ¿por qué se eliminó el video?

En ese momento, Kenia la llamó.

Aunque Patricia no tenía mucho respeto por Kenia, le daba la cara.

—Señora Kenia.

—Un amigo me dijo que tú y Alejandro están juntos de nuevo —preguntó Kenia.

Patricia respondió: —Alejandro y yo somos amigos, ahora no estamos juntos. Además, Alejandro tiene una amante, creo que se llama Ana. Con esta situación, mis padres nunca lo aceptarían.

Si ella estuviera con Alejandro, tendría que ser en circunstancias donde no hubiera otras mujeres.

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