Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 86

Carlos está desesperado buscando trabajo, enviando currículums a todas partes, cuando ve el mensaje de Carmen en WhatsApp.

Inmediatamente pregunta:

[No puede ser, ella no es de las que dejan a uno por otro. No me engañaría así.]

Llevaba más de siete años con Ana, desde la secundaria hasta ahora, y nunca se le había pasado por la cabeza que ella lo traicionara.

No sabía por qué, pero desde que la vio ayer, sentía una ansiedad indescriptible, como si realmente fuera a perderla.

Carmen, al ver la confianza de Carlos en sí mismo, le llama furiosa.

—Hoy mi papá y yo fuimos a Grupo García, y justo en la entrada la vimos llevándole sopa a Eduardo. Y Eduardo, por ella, nos difamó frente al jefe de García. Carlos, ella te ha estado engañando todo este tiempo. Realmente la subestimé, pensé que no haría algo tan descarado.

Aunque, el horizonte de Ana no va más allá de Eduardo.

—¿Eduardo? ¿El asistente personal del jefe en Grupo García? —Carlos se quedó helado.

—Sí, ese mismo. No es tan poderoso como el jefe, pero es atractivo y muy capaz. Carlos, tienes que hacer algo. Incluso mi papá ahora apoya que Ana esté con Eduardo, aunque sea como su amante, mi papá lo aceptaría. —Carmen estaba cada vez más molesta; la actitud de su padre había cambiado completamente.

Carlos sintió un vacío en su pecho, —No, no puede ser. Ella está enojada conmigo, ¿sabes dónde trabaja? ¿Podría ser que solo lo hizo como un favor? Ella nunca sería la amante de nadie.

En los siete años que estuvieron juntos, Ana y él nunca cruzaron ciertos límites, esperando el día de su boda.

A veces pensaba que ella era demasiado conservadora, pero otras veces lo veía como algo bueno. ¿Cómo podría ser la amante de alguien?

—¿Por qué sigues engañándote a ti mismo? Piénsalo bien. —Carmen colgó impacientemente.

Antes pensaba que si podía quitarle el novio a Ana, eso significaría que era mejor que ella.

Sara bufó, —¿Sabías que Ana está siendo mantenida? Por eso dejó a mi hijo.

Si alguien tenía que romper la relación, debería haber sido su hijo, no Ana.

Anteriormente, Ana estaba tan enamorada de Carlos que hacía todo por agradarle. ¿Y ahora lo traiciona?

Elena se enfureció, —Conozco muy bien a Ana, y también conoces cómo es tu hijo. Él fue quien la decepcionó primero. Después de todo lo que Ana ha hecho por ustedes, si tuvieras un poco de conciencia, no harías esta llamada.

—Yo no le pedí que nos tratara bien; fue ella quien lo hizo por estar tan enamorada de mi hijo. Con las cualidades de mi hijo, podría encontrar a alguien mejor. Elena Martínez, siempre te has aprovechado de tu belleza para no comportarte decentemente. Ana es igual que tú, igual de indecente. —Sara la insultó sin miramientos.

—¡Tarde o temprano, tú y tu hijo se arrepentirán! Por las ofensas y el daño que le están haciendo a Ana, recibirán su merecido. —Elena temblaba de ira.

Pensar en el sufrimiento de Ana le hacía hervir la sangre. Colgó el teléfono con lágrimas en los ojos, su corazón se rompía al pensar en el dolor de Ana.