Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 902

A continuación, Ana subió al coche.

Sorprendentemente, Alejandro tomó las bolsas de compras de sus manos.

Se mostraba caballeroso y considerado.

Incluso a cierta distancia, parecía que ella podía percibir su cuidado hacia Ana.

No estaba claro de qué hablaban, pero Alejandro parecía sonreír.

Era raro verlo sonreír, dada su actitud reservada y fría, moldeada por sus experiencias tempranas y la posición social que ocupaba.

Su rostro usualmente solo se suavizaba en presencia de Salvador y algunos amigos cercanos.

En ese momento, el orgullo de Patricia fue repentinamente destrozado.

Su rostro se volvió paulatinamente pálido.

Como Carolina le había advertido, quizás ella y Bryan ya no tenían posibilidades.

Porque Ana era la causa de ese cambio.

No podía ser.

Alejandro no había anunciado su matrimonio y había optado por un enlace secreto, lo cual debía significar que no estaba completamente satisfecho con Ana.

¿Un matrimonio a medias? ¿Cómo podría Ana ser digna de él?

Patricia era claramente la mejor opción para él.

En cuestión de momentos, Patricia recuperó su habitual orgullo y dignidad.

Justo entonces, Kenia la llamó de nuevo.

—¿Cómo lo está considerando, Señorita Patricia? —Preguntó Kenia.

Patricia dudó, pero la escena que acababa de presenciar la hizo reflexionar: —¿Qué tan segura estás? No me involucro en incertidumbres.

—Con una seguridad del cien por ciento, Ana se casó con Alejandro porque entiende de asuntos turbios y sabe cómo manejarlos. Si no actúas, nunca serás su rival. —Afirmó Kenia.

Patricia había escuchado estas palabras de Kenia anteriormente, pero no las había creído.

Esta tableta había estado siempre en el coche, y Ana había sentido curiosidad al verlo bajar con ella para comer.

Resulta que quería hablar de la boda mientras comían.

Ella tomó la tableta.

La pantalla mostraba un correo electrónico con tres archivos adjuntos.

Los abrió uno por uno.

El personal de planificación de bodas era muy profesional, y cada opción era distinta.

Pero a partir de algunas fotos y videos, se podía ver que estas eran el tipo de bodas que toda chica sueña, literalmente haciendo realidad los sueños de sus corazones.

No podía creer que Alejandro ya hubiera contratado a alguien para planificar la boda.

—¿Cuándo contrataste a alguien para hacer esto? —Preguntó.

Alejandro respondió: —Hace un mes. ¿No estás satisfecha con los tres planes?