Mi Pareja Tiene Dos Lobos romance Capítulo 111

La Perspectiva de Blake

Cuando regresé a mi oficina, encontré a dos invitados no deseados sentados allí. Eran Howard y Benjamin.

"¿Por qué estaban ustedes aquí?".

Howard y Benjamin se miraron el uno al otro, y Benjamin dijo: "Leímos sobre el romance de Catherine y Leo temprano en la mañana, y vinimos a mostrar nuestra preocupación".

Cuando Howard vio que yo estaba en silencio, preguntó en voz baja: "Blake, tal vez deberías hablar con Leo y dejar que él aclare las cosas".

"Él tiene razón. Nadie hará preguntas siempre y cuando Leo aclare las cosas. También puede hacer público tu relación con Catherine", dijo Benjamin.

"Gracias por preocuparse por mí. Aún necesito hablar con ella sobre esto". Yo ya había pensado lo mismo que ellos. Cuando invité a Catherine, quería hablarle sobre esto.

Desafortunadamente, ella fue asustada por mi entusiasmo.

"Blake, nunca te había visto preocuparte tanto por una mujer", sonrió Howard.

Benjamin fulminó con la mirada a Howard y dijo: "Sus hijos ya son lo suficientemente mayores como para reconocerte a estas alturas. Por supuesto que debería preocuparse por ella".

Howard giró la cabeza para mirar a Benjamin y bromeó: "¿Cómo te sentirías si de repente tuvieras dos hijos que te llamaran papá?".

"¿Yo?". Benjamin estaba un poco sorprendido. Luego sacudió la cabeza y dijo: "Eso no me pasará a mí. Al contrario, sospecho firmemente que serás tú quien lo experimente".

Howard dijo con certeza: "Eso es imposible. Sabes que solo salí con una mujer".

"¿Y si ella fuera la indicada? ¿Y si quedara embarazada y se fuera, y ahora estuviera sola en el extranjero con tus bebés?". Benjamin no tuvo reparo en llevar su broma más lejos.

Cuando Howard escuchó las palabras de Benjamin, dijo en voz alta: "Eso es imposible. Solo dormí con ella unas pocas veces".

"¿En serio? ¿Unas cuantas veces?". Parecía que Benjamin había escuchado algo interesante.

Howard estaba frustrado. Miró fijamente a Benjamin. "¡Qué bien por ti! Me has atrapado y me has obligado a contar mi secreto. Benjamin, eres tan astuto".

Benjamín se burló. "Si no hubiera hecho eso, nunca sabría que tú y mi primo habían llegado tan lejos".

"Cuida de ahora en adelante. No dejes que descubra tus secretos. ¡De lo contrario, me reiré de ti para siempre!", dijo Howard firmemente y con malicia.

Tenía algunos archivos en mi mano y quería concentrarme, pero fui interrumpido por sus voces.

"¿Ustedes dos planeaban hacerme pagar el almuerzo?". Levanté la vista hacia los dos y pregunté con ligereza.

Ellos estaban discutiendo entre sí, e incluso se sonrojaron. Al escuchar mis palabras, dijeron al unísono: "¡Claro!".

Los miré fijamente sin decir una palabra. "Encuentren algún lugar y esperen allí. Iré a pagar la cuenta después de terminar aquí".

Los dos se levantaron. "De acuerdo. Te esperaremos".

"¡Busca en Google el restaurante más caro de la zona!". Howard elevó su voz y dijo deliberadamente.

Cuando me apresuré, los vi sentados frente a la mesa con caras tristes. Parecía que habían sido golpeados duramente.

Los miré y pregunté: "¿Qué pasó? ¿Por qué aún no han pedido?".

"No quiero comer más", Howard se levantó de repente y salió por la puerta aturdido.

Lo miré con sorpresa y le pregunté a Benjamin: "¿Qué le pasa?".

Benjamín encogió los hombros y dijo: "Fue dejado".

"¿Qué? Ni siquiera tiene novia. ¿Cómo podría ser dejado?".

"Él estaba saliendo con mi prima, Rowena", dijo Benjamin.

Sacudí la cabeza. "Sé lo que pasó. Por supuesto, no estoy enojado contigo. Pero quiero que llames a una conferencia de prensa mañana para aclarar las cosas".

Leo dudó por un momento, pero finalmente asintió. "Lo haré. Estoy seguro de que los rumores también afectarán el trabajo de Catherine. No es bueno para ella tampoco".

Entrecerré levemente los ojos. "Parece que estás muy preocupado por ella".

Leo se puso tenso e inmediatamente explicó: "¡No! Después de todo, ella es la madre de Noah y Hedwig. Me preocupo por ella como el hermano menor de su esposo".

"Por supuesto. ¿Qué otra identidad crees que puedes usar para preocuparte por ella?". Mis ojos se entrecerraron y mi tono fue bajo con un toque de advertencia.

"Blake, no me malinterpretes. No tengo ninguna otra idea", dijo Leo mientras fruncía los labios delgados, luciendo inocente.

Cuando estábamos hablando, mi teléfono sonó.

Miré hacia abajo y fruncí el ceño. "Es de la abuela".

Tomé el teléfono con calma y la puse en altavoz.

Y luego escuchamos su voz feliz al otro lado de la línea. Ella dijo: "Blake, ¿has visto las noticias en línea? Tu hermano tiene novia. ¿Es ella su pareja? Ayúdame a averiguarlo. ¿Es humana? Incluso si lo es, no importa. Me alegra mucho que Leo haya encontrado a su pareja".

Mi voz era baja y suave cuando dije: "Abuela, ella no es la pareja de Leo. Ella es mi pareja".

"¿Qué? Blake, ¿te escuché bien? ¿Ella es tu pareja? ¿De qué manada es?". La abuela comenzó a bombardearme con preguntas.

"No te preocupes, abuela. La llevaré a verte", la consolé.

Ella no tuvo más opción que decir: "Blake, te doy tres meses. Quiero una respuesta satisfactoria en tres meses".

"Abuela, no te preocupes. Lo prometo", dije con una sonrisa irónica.