Mi vida de venganza: de gorda a sexy romance Capítulo 82

"Este asunto no es negociable, si eres inteligente, firma el acuerdo de divorcio ahora mismo. Te he dado más que suficiente, quinientos millones en efectivo, más dos villas".

"Si no lo quieres, entonces tendremos el pleito, pero entonces no recibirás tanto". Dijo Allen fríamente, sin la menor duda.

Él y Sara habían firmado un acuerdo prenupcial cuando se casaron por primera vez.

Todo lo que había en Murphy era de su propiedad personal, ya fuera antes o después del matrimonio, no tenía nada que ver con Sara.

Si había una demanda, Sara no podría obtener ningún beneficio.

Como pareja, habían vivido juntos, y esperaba que no tuvieran que ir a juicio y avergonzar a todo el mundo.

Aunque era difícil tomar esta decisión, sabía que tenía que hacerlo.

En el pasado, aunque Sara se había excedido, no había ido demasiado lejos, por lo que él podía hacer la vista gorda.

Pero ahora ella había hecho algo que casi había dañado los cimientos de la empresa, y eso era algo que él no podía soportar.

Sara sintió que su cerebro estallaba con un zumbido.

Si no lograba superar este obstáculo, tendría que dejar a Allen con quinientos millones en efectivo y dos casas.

Quinientos millones era mucho para una persona corriente, pero para una esposa rica como ella, acostumbrada a gastar mucho dinero, era una gota de agua.

Es que con quinientos millones, simplemente no puede vivir feliz, al menos no comparado con su vida actual.

Es más, si admitiera la derrota, todo lo que hay en la familia Murphy no tendría nada que ver con ella.

Sin ella, Gloria no tendría tanta ventaja en la batalla por la propiedad de la familia Murphy.

"No, cariño, no seas tan cruel, estoy equivocada, realmente sé que estoy equivocada". Sara volvió a pedir humildemente perdón.

Allen, sin embargo, no dijo nada más y se dio la vuelta sin piedad y subió las escaleras.

Al ver esta imagen, Jocelyn ya podía estar segura de que su padre se había decidido de verdad.

Se sintió abrumada por la alegría, pero su rostro no cambió.

Tras una fría mirada a Sara, se levantó, se dio la vuelta y se preparó para subir.

Sara miró a Jocelyn con malicia y le dijo con voz fría: "Jocelyn, no seas complaciente. Las cosas aún no han llegado al gran final, todo es todavía una incógnita".

Jocelyn no respondió, sólo enganchó fríamente sus labios.

"Has expuesto ese vídeo en internet, ¿verdad? Eres realmente despiadada, incluso si invitaste deliberadamente a gente a la fiesta para avergonzarme, realmente publicaste el video en internet".

Sara apretó los dientes, deseando interiormente hacer pedazos a Jocelyn.

Esos comentarios hacían que Jocelyn se sintiera ridícula, ¿qué tan mala tenía que ser una persona para decir algo así?

¿Qué había hecho bien con Gloria y ahora se atrevía a llamarla viciosa aquí?

Sin embargo, Jocelyn se limitó a darse la vuelta tranquilamente y mirándola le preguntó: "¿Tienes alguna prueba?".

"Tú ......" Sara se quedó boquiabierta.

"Sara, decir tonterías sin pruebas, eso se llama calumnia y desinformación, ¿entiendes?"

"Encontraré las pruebas".

"Entonces espera a encontrarlas". Dijo Jocelyn con ligereza.

Su tono no era ligero, su voz era suave, pero bajo sus ojos había una frialdad gélida a la que era difícil acercarse.

Hacía que Sara se sintiera más y más desconocida.

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