¡No huyas, mi amor! romance Capítulo 299

La Señora Lorena no se atrevió a retrasarse y se apresuró a seguir a Mateo y entró.

El médico estaba vendando la herida a Abril.

Eduardo pinchó la incisión con demasiada fuerza, y el dolor hizo que Abril siguió gritando. Lo peor era que no podía ponerse anestesia, así que sólo tenía que soportarlo ella misma.

Cuanto más dolorosa estaba, más enojada se volvía.

No había pensado que fracasaría y sería intimidada por un mocoso.

“¡Esto es insoportable!” Pensaba.

- ¿Dónde está ese mocoso? ¡Tráelo aquí, quiero matarlo ahora! -

Abril gritó de dolor.

La enfermera no se tomó en serio sus palabras. Sin embargo, Mateo, que acababa de entrar en la habitación, lo escuchó seriamente.

- ¿A quién vas a matar? -

La repentina aparición de Mateo sorprendió a Abril, y el personal médico también estaba aturdido y luego se sintió algo nervioso.

Abril siempre era uno de los invitados más importantes de la familia Nieto. Ahora que esto sucedió, el personal médico no sabía cómo explicárselo al Mateo, especialmente después de ver su expresión de enojo.

En el momento en que vio entrar a Mateo, los ojos de Abril se llenaron de alegría. Sin embargo, inmediatamente fingió ser lamentable y dijo -Señor Mateo, fui intimidada -

- ¿De verdad? ¿Quién te intimidó? ¿Quién se atreve a intimidar a la invitada distinguida de la familia Nieto? -

Mateo se burló, pero Abril no lo reconoció.

Los paramédicos querían dar un paso adelante a decir algo, pero Mateo los detuvo con una mirada. Todos se pararon a un lado y no se atrevieron a decir nada.

Si lo hicieron enojar a Mateo, con unas palabras todo el personal médico de este hospital probablemente perdería los trabajos.

Solo podía maldecir a Abril en sus corazones, “¿por qué se metió con ese mocoso? Ahora nos implica. ¡Qué ambiente tan deprimente el de ahora!“

Sin embargo, Abril pensó que Mateo estaba enojada por ella, por lo que estaba algo encantada en secreto. Siguió hablando.

-Señor Mateo, no sé de quién fue ese mocoso. Entraste corriendo y me pinchó en la herida. Mira, estoy infectada. Ese pequeño mocoso incluso dijo que su padre es el más influyente en la Ciudad de H, así que me dijo que no lo provocara. Los niños de hoy están malcriados por los padres. Aquellos niños que no están bien cuidado por sus padres y a los que se les permite hacer todo lo que quieran, deben ser enviados a la oficina de policía para ser educados por la policía -

- ¿Es eso así? -

Desde la puerta llegó la voz de la Señora Lorena.

Cuando Abril vio venir a la Señora Lorena, se sintió un poco desorientada, pero aun así asintió en respuesta -Sí, Señora Lorena , este niño y sus padres son demasiado arrogantes. ¿No es esto un insulto para la familia Nieto?

-No es así, Señora Lorena, Señor Mateo, ¡este no es el caso! -

La enfermera no podía soportar más, dejando la preocupación de perder el trabajo, dio un paso al frente y quería decir algo.

Abril la miró y le dijo -No te toca hablar -

-¿Por qué no le dejas hablar? Ha sido contratada por nuestra familia Nieto -

Tan pronto como la Señora Lorena dijo esas palabras, Abril no se atrevió a decir nada.

De verdad la enfermera era contratada por la señora.

Al escuchar las palabras de ella, la enfermera le contó todo.

-Señora Lorena, en ese día, el niño vino a usar el baño, pero la señorita Abril me ordenó que lo echara. No la obedecí. Se puso enfadada y me rompió un vaso de agua así que su herida empeoró. Salí con prisa para encontrar al médico. Pensaba que la señorita Abril no podía bajar de la cama y no debería ser capaz de hacerle daño al niño, así lo dejé solo en el baño. Pero cuando volví... -

La enfermera no continuó con sus palabras. Realmente no sabía qué decir, pero tanto Mateo como la Señora Lorena sabían lo que ocurrió a continuación.

Resultó que Eduardo estaba aquí para ir al baño.

Porque amaban a su nieto y a su hijo, no sentían nada malo en ello.

La naturaleza de los niños era tener mucha curiosidad. Pero era muy absurdo que una mujer adulta abofetea con fuerza a un niño de 4 años.

Abril no pudo evitar sentirse ansiosa cuando vio que la enfermera les había contado todo.

-No, Señora Lorena, fue el niño quien vino a causar problemas a propósito. Él no vino aquí para el baño sino a causarme problemas. Mira la herida. La apuñaló con su dedo -

-Señorita Abril, tiene que ser honesta. Ese niño no te conocía en absoluto. ¿Por qué había venido a intimidarte? -

La pregunta retórica de la enfermera la hizo incapaz de responder.

La Señora Lorena tenía mala cara y dijo fríamente -Ve y tráeme a ese niño -

Los médicos se fueron a buscarlo con toda prisa.

No trataron mucho tiempo en traer al niño.

Cuando Eduardo vio a Mateo y a la Señora Lorena, inmediatamente lloró y se arrojó a los brazos de la señora.

-Lorena, alguien me intimidó -

Esta escena sorprendió a Abril.

- ¿Quién es ella para ti? -

Eduardo ignoró totalmente las palabras de Abril y levantó la cara. Dijo con tristeza -Estoy desfigurado. ¿Qué debería hacer? ¿Qué debo hacer si no puedo encontrar a una esposa en el futuro? -

Normalmente, cuando Mateo escuchara esto, definitivamente se burlaría de Eduardo. ¿Cómo un niño sabía lo que era una esposa?

Pero ahora que veía la cara roja e hinchada de su hijo, la expresión de Mateo era terriblemente sombría.

-¿Te duele? -

Hablaba con calma, pero le dolía el corazón.

Eduardo asintió.

-¡Papá, esta mala mujer me golpeó! ¡Me duele muchísimo! ¡Ni siquiera no puedo hablar más, y me duelen los dientes! -

Al mismo tiempo, sacó la lengua, que estaba rota con macha sangre.

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