No Soy Tu Bien Desechable romance Capítulo 73

Al día siguiente, el tablón de anuncios de la escuela estaba rodeado de gente.

Fernanda acababa de entrar al campus de la Universidad del Nuevo Mundo cuando sintió que recibía extrañas miradas.

No muy lejos, la voz enojada de un hombre sonó: "¡Fuera de aquí! ¿Qué están mirando?"

Luego, el hombre arrancó algo del tablón de anuncios.

Fernanda frunció el ceño ligeramente, viendo que la persona rodeada era Enrique, quien arrugó el papel en su mano y tenía una expresión sombría.

Las personas alrededor, al ver llegar a Fernanda, se apartaron rápidamente hacia atrás, pero igual no pudieron evitar mirarlos a los dos.

Fernanda bromeó al respecto: "Unos días sin verte, Sr. Enrique, y parece que estás más temperamental".

"¿Encima te ríes? ¿Ves esto y aún puedes reír?"

Enrique le lanzó el papel arrugado a Fernanda.

Fernanda, algo confundida, desdobló el papel.

En él había una mujer con una figura voluptuosa, vistiendo una ropa interior reveladora, y esa cara era, sin lugar a dudas, la de Fernanda.

No solo eso, sino que al lado había escrito muchas palabras sensibles como 'citas a cambio de dinero', 'chica de noche' y 'favoritismos ocultos' entre muchas otras faltas de respeto.

Fernanda solo miró por un momento y luego agitó el papel frente a Enrique: "¿Todo este alboroto es por esto?"

"¿Por qué más sería? Fernanda, realmente no tienes vergüenza, ¿cómo puedes seguir riendo?"

Enrique estaba a punto de explotar de ira.

Pero la persona en cuestión parecía no importarle.

"Esta foto es obviamente falsa, y mira, ¿algo de esto tiene que ver conmigo? Obviamente, alguien con intenciones está tratando de crear opinión pública para sacarme de la universidad".

Dicho esto, Fernanda se dirigió hacia el Edificio Central sin mirar atrás.

Enrique, cada vez más enfadado, pateó el tablón de anuncios, haciendo que la gente alrededor se estremeciera.

Durante la clase, Lorena no dejaba de mirar hacia el tablón de anuncios desde la ventana.

La profesora la llamó dos veces sin recibir respuesta.

Finalmente, el tono de la profesora fue más fuerte: "¡Lorena! ¡Levántate y responde!"

Lorena volvió en sí de golpe y se levantó rápidamente: "Profesora, yo..."

"Ya es bastante malo que no asistas a clases, pero distraerte durante ellas... Sé que tienes buenas calificaciones, pero ya casi es el último año, si no acumulas suficientes créditos, igualmente no podrás graduarte".

En los últimos días, Lorena había estado ausente, y aunque los profesores no decían nada debido a sus buenas calificaciones, su actitud reciente y el descuido en sus ensayos eran cada vez más inaceptables.