No Soy Tu Bien Desechable romance Capítulo 89

Lorena parecía una víctima, en ese momento estaba llorando y acusando a quienes supuestamente la habían maltratado.

Si esto fuera una escuela, tal vez Lorena podría haber ganado la simpatía de los presentes con su actuación, pero este no era el caso.

En el lugar, todos eran zorros viejos en el negocio, con milenios de experiencia combinada.

Los pequeños trucos de Lorena no tenían efecto en absoluto; para los presentes, era simplemente un espectáculo.

Pero Lorena pensaba que la gente creería fácilmente su palabra.

"Qué descarada".

Marisol soltó una risa fría. Era la primera vez que veía a una mujer tan sin vergüenza.

Las lágrimas de Lorena cayeron mientras decía: "Señorita Marisol, sé que no te caigo bien, pero realmente no soy la persona que crees. Ese día me equivoqué de persona y te ofendí, me siento muy culpable. Por favor, señorita Marisol, perdóname, solo quiero tu perdón".

Lorena se mostraba muy humilde.

El siempre complaciente Sr. Torres, viendo la oportunidad, se acercó a Marisol y dijo: "Señorita Marisol, la señorita Lorena es una estudiante universitaria muy apreciada por el Sr. Borrego, su carácter es impecable. No debería creer solo en lo que dicen los demás. Por favor, en consideración al Sr. Borrego, perdone a la señorita Lorena".

Tras decir esto, el Sr. Torres lanzó una mirada significativa hacia Fernanda.

Obviamente, no conocía la identidad de Fernanda.

"¿Y tú quién te crees? ¿Y Sebastián qué? ¿Por qué debería hacerlo? "

Marisol miró al Sr. Torres, cuya cara se tornó inmediatamente seria.

Marisol dijo fríamente: "Ni siquiera si el mismísimo dios de la fortuna estuviera aquí, dejaría que esta mujer se quedara. ¡Mi familia Jara no es lugar para que cualquier pobre diablo entre!"

El rostro de Lorena se tornó entre el rojo y el blanco, nunca antes había sido humillada así estando al lado de Sebastián.

Marisol ordenó fríamente: "¡Seguridad! ¡Llévensela!"

Lorena no podía creer que Marisol fuera tan intransigente.

Miró a su alrededor, buscando apoyo, pero nadie se movió para detenerla.

¿Acaso no temían ofender a Sebastián?

Al ver que la situación estaba a punto de salirse de control, el Sr. Torres rápidamente se puso de pie y dijo: "Srta. Marisol, nosotros, el Sr. Borrego, estamos muy interesados en colaborar con usted, Srta. Marisol. No podemos perder la oportunidad de trabajar juntos por una persona que no tiene nada que ver con esto. La Srta. Lorena vino en representación del Sr. Borrego específicamente para disculparse por lo ocurrido la última vez, y de paso hablar sobre futuros proyectos de cooperación. En cuanto a algunas personas con malas intenciones..."

El Sr. Torres lanzó una mirada hacia Fernanda y dijo: "¡Definitivamente quieren detener la cooperación entre nuestras familias y no tienen buenas intenciones!"

"Sebastián tiene suficiente conmigo como su representante, no es necesario que venga nadie más". Después de un largo silencio, Fernanda habló con una expresión indiferente: "Si la Srta. Marisol quiere echarla, yo me haré cargo de las consecuencias, el Sr. Torres no debe preocuparse tanto".

El Sr. Torres se burló: "¿Tú? ¿Quién te crees que eres para representar al Sr. Borrego?"