Novia sustituta del CEO romance Capítulo 8

"¿Qué?" Cuando Alyssa escuchó esto, sus piernas casi se ablandaron. Casi le entró el pánico. "¡No puedo hacer esto! No sé cómo!"

Aunque odiaba a este hombre con todas sus fuerzas, ella ciertamente no iba a dejarlo morir delante de sus ojos. Y no era tan estúpida como para morir con él.

A pesar de que ella no era más que un bebé accidental que nació por un fallo en la concepción, a pesar de que Jason y Aurora la tomaron como una maldición para sí mismos y nunca la quisieron, ella no renunció a la esperanza de vivir una vida mejor.

Y sólo porque este hombre tuviera deseos de morir, ¡no significaba que ella también los quisiera!

Las cejas de Emmett se alzaron: "¿O prefieres que te entierren junto a mí?".

Aunque seguía siendo un tono indiferente, había en él una firmeza incuestionable.

Parecía que no le quedaba más remedio que morder la bala.

Con el rostro pálido, Alyssa fue a buscar las cosas que le había pedido.

Además, desde el momento en que se casó con la familia Lawrence, su vida ya se había derrumbado hasta el punto de no tener arreglo. ¿Qué es lo peor que podría pasar más? ¿Que muriera? Esa podría ser la mejor manera de acabar con su miserable vida, ¿verdad?

Sus labios se curvaron en una sonrisa triste.

Después de recoger las cosas, se sentó a su lado y sostuvo la espada en la mano. Aunque había hecho todo lo posible por mantener la calma, no pudo evitar que le temblaran las manos.

"Voy a quitártelo". Dijo mientras usaba la cuchilla para despegar el borde fresco de su herida mientras prestaba mucha atención al estado de "Justin".

Pero ella encontró que aparte de su cara pálida y gotas de sudor en la frente, él no tenía ninguna reacción particular, e incluso su frente sólo se frunció ligeramente.

En cambio, ella, que estaba operando, no dejaba de temblar de miedo.

Pero una cosa que le pareció inusual fue que él no dejaba de mirarla todo el tiempo.

Ella podía sentir que él estaba débil ahora, pero todavía había fuerza en sus ojos.

Alyssa no pudo evitar decir: "No me mires".

Emmett no estaba tan tranquilo como parecía. El dolor en su cuerpo era suficiente para hacerle querer gritar. En ese momento, con la cantidad de sangre que había perdido, podía sentir cómo se le nublaba la vista en el proceso.

Sin embargo, cuando miró a Alyssa, el dolor se alivió milagrosamente un poco.

"No necesitas estar tan nervioso. Creo en ti. No me dejarás morir". La voz de Emmett era ligera y suave, pero llena de determinación.

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