Perdida Ficticia, Amor Genuino Redescubierto romance Capítulo 40

¿Cómo era posible que Leila de repente olvidara lo retorcido que era Rubén?

Recordaba que cuando ella estaba en segundo año de la secundaria, la escuela organizó un viaje de primavera, y Leila y Rubén estaban en la misma clase.

Debido a la normativa de la escuela, todos tenían que participar en el viaje de primavera.

La escuela había alquilado un autobús, pero resultó que había dos personas de más. La escuela originalmente planeaba alquilar un autobús adicional, pero Rubén se ofreció a tener a su chofer para llevarlo al destino. Al escuchar eso, Leila se emocionó de inmediato y le rogó a los profesores que le permitieran a Rubén llevarla también.

Como Leila y Rubén vivían relativamente cerca, Leila finalmente logró, con una tenacidad descarada, un lugar en el auto privado de Rubén.

El día antes del viaje de primavera, Leila, emocionada, fue a buscar a Rubén para comprar bocadillos.

Aunque Rubén la despreciaba de varias formas, de alguna manera, Leila logró arrastrarlo a la calle.

En ese momento, la hermana de Leila, Samantha Cuéllar, ya era una abogada bastante conocida.

Leila nunca imaginó que después de molestar a Rubén hasta llevarlo al supermercado, se encontraría con Samantha.

En ese entonces, Samantha y su futuro cuñado, Norman Mondes, estaban parados juntos, viendo a Leila molestar a Rubén.

Samantha, con su rostro tranquilo, frunció ligeramente el ceño y dijo: "Leonor, ¿quién es este?"

En un principio, Leila estaba pegada a Rubén sin ninguna vergüenza, pero al ver a Samantha y Norman juntos, Leila se debilitó. Aunque ella estaba enamorada de Rubén, lo que ya no era un secreto en la escuela, en casa estaba prohibido tener un noviazgo temprano.

Si Samantha y Norman descubrieran que sentía un amor secreto por Rubén, probablemente arruinarían sus sentimientos antes de que pudieran florecer.

Por lo que...

Leila soltó la manga de Rubén y le sonrió falsamente a Samantha. Ella golpeó el hombro de Rubén y dijo con una sonrisa: "Este es mi compadre, del grupo de estudio de nuestra clase. Los mejores estudiantes ayudan a los peores. Soy la peor, y él es el mejor de nuestra clase, Rubén. Somos como hermanos, él es muy bueno conmigo."

Después de eso, Leila, por miedo a que Samantha no le creyera, volteó y pinchó el brazo de Rubén, sonriendo suavemente en busca de aprobación: "¿Verdad, Bro Rubén?"

No sabe qué le pasó por la cabeza en ese momento, pero para que pareciera más creíble, Leila, frente a Samantha, casualmente llamó a Rubén "Bro Rubén".

La inocente Leila se estrelló contra la firme espalda del hombre. Se frotó la nariz y miró con tristeza a las elegantes facciones de él, confesando con emoción: "Rubén, ¿por qué no me aceptas?"

"No hago nada que sea inmoral, como el amor entre hermanos."

El entusiasmo de Leila fue apagado instantáneamente por el balde de agua fría de Rubén...

Desde entonces, Leila se negó a llamarle Bro Rubén, solo lo llamaba Rubén, pero él se negaba a responder a menos que ella lo llamara Bro Rubén enojada.

Desde entonces, todo el colegio supo que Leila había sido rechazada y que Rubén la había considerado como una hermana.

Así, un grupo de fanáticas de Rubén en la escuela vieron a Leila como una gran oportunidad para acercarse a él. Le llenaban el pupitre de cartas, chocolates y flores, pidiéndole que los entregara.

Fueron los días más desconcertantes para Leila...

Justo cuando estaba a punto de borrar todos esos recuerdos, el hombre apareció de nuevo en su vida, obligándola a recordar todo nuevamente...