Recuperar Su Amor (Luna y Joshua) romance Capítulo 266

Él todavía recordaba lo que Luna le había dicho en el pasado.

'Si tenemos hijos, les enseñaré a ser ellos mismos. Deben actuar con cortesía en público, pero cuando estén en casa, pueden hacer lo que quieran'.

Era evidente que Alice había olvidado su promesa. Parecía que seis años realmente podían cambiar a una persona, tanto que Joshua ya no podía reconocerla.

Él suspiró y condujo a Alice al interior de la casa.

"¡Papi!".

"¡Bienvenido a casa, Papi! Sabemos que has tenido un largo día de trabajo". En cuanto pusieron un pie en la casa, se encontraron cara a cara con Neil y Nellie. Los dos niños se colocaron a ambos lados de la puerta y se inclinaron ante Joshua, sonriendo.

Joshua frunció inmediatamente el ceño ante esta visión. Miró más de cerca a sus dos hijos de pie ante él. La cara de Nellie estaba roja y llorosa,

mientras que la de Neil estaba marcada por la impaciencia. Era obvio que los dos niños habían sido obligados a hacer esto contra su voluntad.

Joshua soltó a Alice y le lanzó una fría mirada. "¿ Son estos los supuestos modales que intentas enseñarles?".

Alice se congeló. Se dio cuenta de que Joshua estaba disgustado.

Ella entrecerró los ojos, molesta. Les había ordenado a los niños que elogiaran a su padre cuando llegara a casa del trabajo, ¡pero nunca les dijo que esperaran junto a la puerta y le hicieran una reverencia!

Las miradas de Neil y Nellie transmitían claramente a Joshua que se sentían miserables y que era Alice quien los ponía en esa situación.

Alice sonrió con nerviosismo. "No, claro que no. Deben haber aprendido esto de la televisión.

Era exactamente como Nellie había descrito.

La cara de Alice palideció de inmediato. Pensó que se había salido con la suya, pero no esperaba que los dos niños hubieran grabado todas las conversaciones en secreto.

Después de escuchar la grabación, el ceño de Joshua se frunció mucho más. Se dio la vuelta y miró a Alice. "Los niños son todavía pequeños, y les dices cosas como ésta. ¿Es esto lo que se le debe enseñar a los niños?".

Alice se mordió el labio con nerviosismo. Ya no tenía forma de negar ya que los niños habían sacado a relucir las pruebas. Ella permaneció en silencio durante un largo rato antes de estallar repentinamente en sollozos. "Joshua, lo siento... Desde que volví, has estado trabajando horas extras todas las noches. A veces ni siquiera vienes a casa. Te vas al amanecer y vuelves tarde por la noche, dejándonos a los tres en casa.

Pensé...".

Alice se secó las lágrimas que le caían por la cara. "Pensé que tal vez no te agradábamos, y que por eso no parecías querer quedarte en casa...".