Recuperar Su Amor (Luna y Joshua) romance Capítulo 384

La voz baja de Joshua era distante, pero firme.

Alice rio suavemente. "Joshua, si Theo no es su novio, ¿por qué ella no lo negó con vehemencia cuando Theo afirmó que era su novio?".

Joshua frunció el ceño y la miró. "¿Por qué Luna no te rechazó con vehemencia cuando la hiciste beber? ¿Quería beber alcohol?".

El rostro de Alice se puso un poco pálido. Quería decir algo más, pero Joshua la interrumpió.

Él tomó una respiración profunda. "Pase lo que pase, fui yo quien trajo a Luna a este viaje de negocios. Ella se emborrachó por mi culpa. Si algo le pasa esta noche, no podré librarme de la responsabilidad".

Luego, Joshua le lanzó a Lucas una mirada con frialdad. "¿Por qué sigues parado ahí? ¡Ve y búscala!".

Lucas dudó un rato antes de irse rápidamente.

Alice apretó los dientes.

"Joshua, tratas tan bien a tu personal...".

"No lo suficientemente bien". La voz de Joshua era fría. "Si lo hiciera, ella no tendría que haber

bebido en mi nombre y terminar así".

Él le lanzó a Alice una mirada inexpresiva." Espero que este incidente de esta noche sea la última vez que ocurra. Tienes que recordar que no importa lo que suceda en el futuro, no puedes aliarte con extraños para obligar a nuestro personal a beber".

Alice asintió obedientemente. Metió la cabeza en los brazos de Joshua y se frotó cariñosamente contra él. "Sé que lo que hice estuvo mal. No volverá a suceder...".

Joshua dejó escapar un suspiro de alivio. Luego, se dio la vuelta y fue al baño.

Alice entrecerró los ojos.

Ella le envió un mensaje de texto a Hailey: [Busca a Luna por toda la ciudad. Ella está borracha.

Hazle un favor consiguiendo algunos hombres para satisfacerla],

"¡Ella está aquí!".

"¡Vayan por ellos!".

Esa medianoche, Luna se despertó sobresaltada. En el momento en que abrió los ojos, todo lo que vio fue el cielo oscuro y la luz de la luna.

Una rabia fría la abrumó. Su mente, antes embriagada, se puso sobria al instante.

Luna se mordió los labios. Extendió la mano y agarró a Theo por los hombros.

"¿Por qué no me bajas? Yo... yo... puedo caminar por mi cuenta".

"Está bien. Ya casi llegamos a la carretera principal".

Theo respiró profundamente. "Me comuniqué con mis amigos para que nos recogieran".

Sin embargo, Theo no esperaba que en el momento en que llegaran a la carretera principal, un BMW negro también se detuviera allí.

Lucas se bajó del coche.

Los pasos detrás de ellos se acercaron. El grupo de personas casi los estaba alcanzando.

Estaban acorralados en ambas direcciones.

Al mirar el rostro pálido de Theo y Luna, Lucas se apoyó contra la puerta del coche. "¿Por qué están corriendo?", él reprendió.