Secretos de Lobos. romance Capítulo 1

Narrador.

Después de aquella hazaña en la que Karim había salido victorioso por el hecho de que su cuerpo no se corrompió con la oscuridad que posee su hermano agradeció con gesto amable a su pueblo disculpándose con la mirada, aunque no es de pedir disculpas, igual mostraba a su especie que su líder está cambiando para mejor. Luego se dirigió a su despacho con el fin de atender esa inquietud que percibía en su beta. Todo esto presintiendo que algo se avecina y no era para nada bueno.

Como rey de esa especie en estos últimos días había estado muy ocupado atendiendo problemas que le aquejan a las manadas.

—Sé que los obligué a hacer algo en lo que no estaban de acuerdo, y les agradezco porque me apoyaron sin poner objeción a mi solicitud—les manifestó a sus dos amigos que habían entrado junto con él.

—Sabes que aparte de que eres nuestro alfa supremo, eres nuestro amigo, te servimos fielmente, pero también compartimos tu dolor— expresó el delta, el cual es más ágil con las palabras. Mientras que a Mohamed le cuesta, pero no es que sea distinto a Adub, ambos quieren a Karim por igual.

—Yo digo lo mismo, lo que pasa es que soy algo menos poético, este es un romántico de lo peor —. Mohamed no podía quedarse sin hacer reír a sus amigos debido a que buscaba decir algo bonito y terminó por tornarse chistoso.

—Eres un desastre natural Mohamed Mursi — le señalizó Karim sin parar de reír junto a Adub.

Mohamed, sin entender que había hecho mal, se rascaba la cabeza.

—A este le va a tocar esperar los años que le faltan a la cachorra para que madure más los años que le va a costar conquistarla, por bruto—. Mohamed abrió los ojos de golpe recordando su problema latente, ya que al estar allí bromeando con sus amigos había olvidado comentarle al alfa de su reciente suceso.

—Karim, sabes que Asminie ha tomado el control del cuerpo de Rocío....,— se detuvo porque encontraba las palabras adecuadas para explicarse, por el hecho de que no quería que sus dos amigos terminarán riéndose nuevamente.

—¿Le pido como alfa que le ceda el mando a su humana? —le preguntó Karim creyendo que esa era la causa de la inquietud que percibía en él.

—¡No!…, — Mohamed casi le grita esa palabra y Adub como siempre volvió a reír.

—¡Joder!, no te burles, dejen explicarles. Ustedes me sacan de quicio— protestó Mohamed muy irritado, entonces el delta levantó ambas manos, dejándole ver que ya no iba a interrumpir más.

En cambio, Karim lo miraba expectante por qué lo notaba nervioso, algo que no es costumbre en Mohamed, quien siempre está hiperactivo buscando a quien desquiciar. Incluso le había parecido raro que no fuera a molestar a Kasul en el sótano.

#Siente lástima por él# le aclaró Zilo cuando escuchó el pensamiento de su humano que, aunque estuviera resolviendo un problema o suceso no dejaba de pensar en Kasul sintiendo pena porque se encuentra en soledad, a pesar de saber que Jazmine siempre estaba presente Kasul pedía que se fuera.

—Lo que quiero decirles es que Asminie me pide que la marque, ya que según ella va a madurar diez años más con mi marca y no le puedo creer, siento que lo dice porque es una cachorra intensa que solo quiere morderme y sabe que si no me convence es difícil que acceda— Mohamed se pasó la mano por la cara una y otra vez encontrando que era vergonzoso tener que exponer sus problemas personales.

—Una loba gama tiene ciertos poderes, a pesar de que no abundan lobos como ella igual creo que ciertamente tiene la razón. Ustedes son almas gemelas y cuando se completa la unión creada por la diosa los poderes se mezclan entre sí canto tú tendrás ciertos poderes que resaltan en ella como ella algunos que resaltan en ti, también su loba va a madurar para estar del mismo tamaño que tu logo y eso implica que ella también debe tomar su forma adulta.

Mohamed no podía creerlo, aunque su alfa nunca se equivoca, saber que no tendrá que esperar lo dejó boquiabierto y la mandíbula inferior casi se le cae al piso. De tan asombrado que estaba.

#Grrrr, ve tonto te dije que mi Asminie tenía razón# sé quejo su lobo molesto con él sin dejar de bruñir.

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