Señor Lafuente, su esposa ha pedido el divorcio hace tiempo romance Capítulo 170

Hugo sabía dónde estaba esa pastelería.

Tampoco fue a esa pastelería después de que Rebeca se fuera.

Subió al carro y tras un momento de duda, marcó una llamada: —Kevin, ya he vuelto, tengo que tomar un avión más tarde, pregúntale a Logan si está libre, si no lo está, acompáñame tú al hospital dentro de un rato para ver cómo está Natalia.

Kevin se sorprendió: —¿De verdad has vuelto? ¿Cuándo has vuelto?

Hugo no contestó a su pregunta: —Anda, llama y saluda a Natalia a ver si luego le viene bien.

Kevin estaba a punto de preguntarle a Hugo por qué no llamó él mismo a Logan y Natalia. Pero pensándolo mejor, supuso que Hugo debía tener otras cosas que hacer y mucha prisa, y como tampoco había visitado a Natalia todavía hoy, aceptó sin pensárselo mucho.

Logan no estaba disponible.

Después de colgar, Hugo compró un ramo de flores y una cesta de fruta y se dirió al hospital para encontrarse con Kevin.

En la sala del hospital.

Al verle, Natalia sonrió y preguntó: —¿Por qué has vuelto de repente?

Hugo dijo sin mucha expresión: —Volví para ocuparme de algo.

Natalia bajó la mirada y acarició las flores que había traído y dijo: —Ajá...

¿Realmente había vuelto para ocuparse de algo o era para verla?

Aunque no había vuelto enseguida cuando ella se lesionó, fue muy considerado por su parte volver a verla en cuanto pudo.

***

Rebeca se quedó en la casa de los Estrella esa noche.

Al día siguiente, se levantó temprano.

Mirando la suculenta bien cuidada en el balcón, Rebeca se estiró de buen humor.

Sus tíos ya estaban despiertos cuando bajó, ocupados en preparar el desayuno para ella y sus primos.

Al verla, sonrió: —Rebeca, ¿estás de buen humor hoy?

Rebeca se acercó a ayudar a tostar el pan y sonrió: —Sí.

Cuando el plato de desyuno americado ya estaba listo, Rebeca se sentó y estaba a punto de comer cuando sonó su celular.

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