Señor Lafuente, su esposa ha pedido el divorcio hace tiempo romance Capítulo 228

Logan no se fue esa noche.

Al día siguiente, la madre de Logan, Sara, y Lidia y su compañía volvieron una tras otra.

Cuando se enteraron de que Logan había pasado la noche en el hospital, le dijeron que se fuera a casa a descansar.

Logan le dijo a la anciana: —Te vengo a ver esta noche.

Esperanza le ignoró.

Logan salió del hospital y marcó el número.

Una hora más tarde, los Mena y los Rojas recibieron la noticia de que les habían echado del proyecto.

Inmediatamente se pusieron en contacto con Natalia.

Natalia dijo: —Es Esperanza. Se cayó anoche...

La familia Rojas y la familia Mena no esperaban que esto sucediera.

Rodrigo dijo: —Entonces... ¿Esperanza también aprovechó para pedirle a Logan que rompiera contigo y que no podía divorciarse de Rebeca?

Natalia frunció los labios.

Hablaron un rato más antes de que ella colgara.

En ese momento llamaron a la puerta: —Señorita Mena, la reunión está a punto de empezar.

—Entendido —dijo Natalia, colgando el celular y saliendo del despacho, justo a tiempo para ver a Rebeca, que charlaba con el señor García sobre trabajo, mientras se disponía a dirigirse a la sala de reuniones.

Aunque sabía que la colaboración entre Furense y Tylerty seguía en marcha, y que los técnicos de Tylerty tenían que venir a Furense de vez en cuando para el mantenimiento del sistema, no esperaba encontrarse con Rebeca en Furense tan casualmente justo hoy.

Rebeca notó que alguien la miraba y miró hacia ella para darse cuenta de que era Natalia y no dudó ni un segundo en apartar la mirada.

Eran poco más de las diez cuando Rebeca se giró para ir al baño, solo para ver a Logan al salir por la puerta.

Había llegado en algún momento y estaba apoyado en la pared, con cara de estar esperando a alguien.

Sin dudar un segundo en sus pasos, estaba a punto de cruzar por su lado y marcharse cuando Logan la miró y habló: —La abuela se cayó anoche y se rompió el fémur, necesitará una prótesis.

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