Señor Lafuente, su esposa ha pedido el divorcio hace tiempo romance Capítulo 269

Sara y los demás llegaron a casa sin ver a Rebeca, suponiendo que había ido al aeropuerto con Logan a recoger a la niña.

Ahora que Logan y Carolina habían llegado a casa y no habían visto a Rebeca, pensaron que era bastante extraño.

Sin embargo, no les importaba Rebeca, así que no se molestaron en preguntar.

Logan dijo: —Tenía algo que hacer.

Iván no lo dudó y continuó jugando con Carolina.

Esperanza era consciente de lo que ocurría, pero no dijo nada.

Después de cenar, Carolina jugó un rato sola, se aburrió y llamó a Rebeca a pesar de todo.

Incluso en vacaciones, Rebeca no tenía intención de dejarse estar ociosa.

Cuando entró la llamada de Carolina, Rebeca estaba estudiando la información que le había dado Israel.

Al ver su llamada y pensar que hacía casi un mes que no se veían, Rebeca tomó el celular despreocupadamente: —Hola.

Hacía demasiado tiempo que Rebeca no contestaba al teléfono.

Carolina no se había hecho ilusiones.

Se sorprendió gratamente al ver que Rebeca atendió de repente: —¡Mamá!

Rebeca tenía la atención puesta en la computadora y respondió débilmente: —Sí.

Carolina no lo notó y se limitó a decirle contenta: —¡Mamá, ya estoy en casa!

Rebeca ni siquiera sabía que se había ido del país.

Al oír esto, asintió.

Desde que Rebeca contestó al celular, Carolina se puso tan contenta que saltó sobre la cama: —Mamá, ¿cuándo vas a terminar con tu trabajo? ¿Volverás esta noche? Quiero que me abraces para dormir esta noche, tengo tantas cosas interesantes que contarte, y también me apetuce tu desayuno, ¿cuándo vas a volver?

Rebeca no le dijo que no volvería más a la casa de los Lafuente.

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