Señor Lafuente, su esposa ha pedido el divorcio hace tiempo romance Capítulo 494

Sin darse cuenta, Rebeca levantó la vista y vio el desprecio y la arrogancia bajo los ojos de Natalia.

Tras establecer contacto con sus ojos, Natalia retiró la mirada.

Cristian rozó sus labios: —Es realmente arrogante.

Mirando a aquellos invitados que entablaban conversación con Natalia y José, queriendo cooperar con ellos, Rebeca agarró con fuerza la taza que tenía en la mano y dijo con voz débil y los ojos bajos: —Tiene gente que la quiere, y gente que le da bastante apoyo, es normal que sea arrogante.

Hablando de eso, hizo una pausa y dijo: —Hay unos cuantos talentos muy buenos en el Grupo Mena.

Cristian sabía que en realidad ella quería hacer algo al Grupo Mena, sin embargo, probablemente le preocupaba que si él se involucraba, tendría que cargar con la responsabilidad si algo salía mal, así que no le dejó preguntar más.

Ahora que la oía tomar la iniciativa de mencionarlo, sabía que las cosas no iban bien.

Se acercó y susurró: —¿No van bien?

—Sí.

Ella había hackeado el sistema del Grupo Mena unas cuantas veces, y podía sentir claramente que la protección de su sistema no estaba al mismo nivel que en el pasado.

Y aunque lo había hecho con mucho sigilo, los técnicos que Logan les mandó estuvieron a punto de pillarla.

Obviamente, Logan estaba ayudando a los Mena de ser atacados por ella.

El poder financiero de Logan era fuerte y sus conexiones eran amplias, y disponía de mano de obra, material y recursos ilimitados que podía proporcionar al Grupo Mena.

Así que, ya fuera una invasión tecnológica, o cualquier otra forma de acabar con el Grupo Mena, realmente no era realista.

La razón por la que nadie en la familia Lafuente podía manipularlo era porque Logan tenía innumerables empresas a su nombre, y se decía que hace unos años alguien tenía estadísticas financieras que decían que sus activos personales eran más fuertes que todo el Grupo Lafuente.

A Tylerty le iba muy bien ahora, pero en términos de la riqueza personal, Cristian y Rebeca no estaban realmente en la misma liga que Logan.

Por lo tanto, invertir en Furense y el Grupo Mena era pan comido para él.

Al pensar en esto, Cristian apretó los dientes de rabia.

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