Ser una supermodelo internacional, aún no estaba en sus planes, aquello aún le parecía un poco lejos, solo quería hacer bien y vivir su presente, hacer que Gael y Nidia pagaran el precio.
Al mediodía, en la víspera de la reunión de Cumbre del Arte, Gael, quien hacía mucho tiempo que no almorzaba con ella, sorprendentemente la llevó al restaurante de la planta baja y reservó un almuerzo a la luz de las velas que dejó a todos asombrados. Viendo cómo las rosas rojas y las velas se reflejaban entre sí en el ambiente romántico, Xiomara se sentó frente a la mesa sin inmutarse, con la ayuda de Gael.
"Pedí tu filete favorito, solomillo..."
Xiomara se quedó atónita, sin hablar. Resulta que después de casi cinco años juntos, él no recordaba lo que le gustaba.
"¿Qué pasa?¿No te gusta?".
Ella estaba a punto de hablar, pero el chef alto vestido de blanco, sosteniendo una bandeja, de repente se acercó a ellos y le dijo: "Srta. Rivas, hoy tenemos tu favorito, filete mignon. En nombre del restaurante Defey, te deseo un feliz matrimonio".
Al escuchar eso, el rostro de Gael cambió de color, pero no pudo reaccionar, solo pudo poner el plato de Xiomara incómodamente: "Guau, ¿tus gustos han cambiado?".
"Gracias, pero aún no nos hemos casado", lo ignoró, pero levantó la cabeza para explicar al chef. "Pero ustedes son muy considerados, recordaron lo que dije una vez".
El chef se fue con cortesía, y ella volvió a centrar su atención.
"La próxima vez recordaré lo que le gusta a mi querida esposa", Gael parecía estar hablando para sí mismo.
"Come rápido, tenemos que revisar los documentos en un rato", Xiomara sonrió fríamente en su corazón, pero su rostro parecía normal, solo que en ese interludio recibió un mensaje de texto de alguien llamado 0819, que resultó ser de Yamil, el significado de 0819 era el día en que se casaron.
[El bistec es el que pedí que te enviaran, el mensaje del chef es de mí parte... ¡es para desearNOS feliz matrimonio!]
Xiomara soltó una risita y luego respondió debajo de la mesa: [Gracias, ¿cómo sabías dónde estaba?]
[Si quiero saberlo, puedo saberlo sin problemas] Yamil envió este mensaje con frialdad.
Ella miró a su alrededor con su teléfono, pero no lo vio en ninguna parte. Aunque no sabía cómo había logrado enviarle ese regalo tan considerado, Xiomara sintió que él estaba allí, cerca de ella. Su presencia era tan imponente como la de un emperador, imposible de ignorar o rechazar.
"Xiomara, ¿qué estás mirando?", Gael interrumpió su mirada, sus ojos castaños llenos de dudas.
"Nada pues...", negó con la cabeza y cambió de tema con calma. "Gael, ¿cuándo vamos a registrar nuestro matrimonio?".
"Una vez que pase esta tormenta, tú lo sabes, Nidia está en la elección de las diez mejores modelos del año, es un gran momento para ella. Xiomara, gracias a Dios que te tengo, si no, Nidia podría haberse arruinado esta vez", Gael le sirvió vino tinto y brindó con ella.
"Te haré pagar el doble", sonrió dulcemente, su tenue hoyuelo la hacía parecer aún más hermosa.
Pero en ese momento, Gael no podía ver o darse cuenta de nada, su mente estaba entumecida por los años de susurros de Nidia a su lado. Mucho menos notar que Xiomara estaba hablando con segundas intenciones.
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