Tu Leti Ya Está Muerta, Llámame Leticia romance Capítulo 189

Durante estos días que Israel la rescató, Leticia se sintió como si no estuviera viviendo su vida real.

Si se pudiera decir que antes de eso Israel había cambiado un poco.

Pero estos días parecía que Israel había cambiado por completo, incluso estaba dispuesto a renunciar a unirse con la familia Rosé por ella.

Ni siquiera se atrevía a soñar con algo así ni en sus sueños más locos.

"¿Leticia?"

La voz de Leira sonó en su oído.

Leticia miró a Leira.

"¿Qué pasa, abuela Banes?"

"¿En qué estabas pensando? Te llamé muchísimas veces antes de que escucharas", preguntó Leira Banes.

Leticia se sintió un poco avergonzada.

Leira Banes no esperó su respuesta y continuó: "Cuando lleguemos a Valle San Rafael, no tienes que estar conmigo todo el tiempo. Si quieres ver a tus amigos, no te preocupes y hazlo".

"Yo también quería decirte eso", dijo Leticia lentamente. "De hecho, realmente quiero ver a alguien, pero..."

Viendo que Leticia no quería continuar, Leira le preguntó: "¿Es una persona a la que Israel no quiere que veas?"

Leticia suspiró con impotencia: "Sí".

"¿Tu amante?", preguntó Leira Banes.

Leticia rápidamente negó con la mano: "No mi amante, un vecino de mi infancia".

"¿Alguien a quien te gustaba antes?", Leira Banes bromeó.

Leticia quería explicar.

Leira Banes le palmeó la mano y le dijo: "Está bien, estaba bromeando contigo. ¿Piensas que no me doy cuenta de lo que sientes por Israel?"

Leticia se quedó sin palabras.

"Te cubriré", dijo Leira.

"Gracias, abuela Banes", dijo Leticia con sincero agradecimiento.

"El agradecimiento no sólo se dice, ¡tienes que ser una buena guía turística para mí!", le dijo Leira Banes muy seria.

Leticia asintió con una sonrisa dulce: "¡Prometo cumplir con la tarea!"

Después de salir del aeropuerto, el coche se dirigió al centro de la ciudad y llegaron al hotel de siete estrellas de Leira Banes.

Después de desearle buenas noches a Leira Banes, Leticia regresó a su habitación, se acostó y rápidamente sacó su celular.

Como era de esperar, Israel había enviado muchos mensajes.

No era como antes.

Incluso si no respondía a sus mensajes por mucho tiempo, Israel no se enojaba.

Incluso había enviado dos emoticones de tristeza que no sabía de dónde los había sacado.

Leticia sonrió y respondió: "Abuela Banes estaba aquí, así que no pude ver mi celular".

En el momento que envió el mensaje, apareció que Israel estaba escribiendo.

"¿No le dijiste que nos íbamos a casar?", preguntó Israel.

Leticia miró el mensaje sin saber qué responder.

Israel estaba actuando de manera extraña últimamente.

En cuanto al asunto del matrimonio, todavía se sentía irreal y aún no estaba resuelto, así que no le diría a nadie.