Tu Leti Ya Está Muerta, Llámame Leticia romance Capítulo 43

Cuando Alarcón estudiaba en el extranjero, era conocido por ser un donjuán y además era bastante guapo, así que se metió en varios líos.

Por eso, también recibió amenazas de muerte.

Todavía recordaba la primera vez que lo amenazaron de muerte, el adversario era la mafia del país, y él estaba tan asustado que pasó varios días inquieto.

Al final, su familia intervino y solucionó el problema.

"¿Te han amenazado de muerte antes?" preguntó Alarcón.

Leticia lo miró como si estuviera loco: "¿Qué quieres decir?"

"¿No te asusta?, ¿No estás preocupada?" Alarcón preguntó nuevamente.

"¿De qué serviría tener miedo?" Leticia guardó su computadora en su mochila, "Gracias por arreglar el transporte, nos vemos mañana a las siete de la mañana en la entrada del hotel".

Después de que Leticia se fue, Alarcón siguió pensando hasta que Israel llamó.

"Sr. Herrera, ¿dónde estás? Estoy esperando para pagar la cuenta~" Alarcón habló con un tono bastante irritante.

"Ya envié a algunas personas allí", dijo Israel fríamente, "Ellos se encargarán del problema de la zona".

"Vaya," Alarcón se recostó en su asiento, "¿Estás haciendo esto por mí?"

"Di lo que tienes que decir", respondió Israel, impaciente.

"¿No vas a dejar en paz a la secretaria Fermínez?", preguntó Alarcón.

"No tengo la intención".

Alarcón, que había estado hablando con indiferencia, se sentó derecho cuando escuchó la respuesta.

"¿Qué?"

"Dije que no tengo la intención".

"¿Cuál fue la reacción de la secretaria Fermínez?", preguntó Alarcón.

Parecía que la secretaria Fermínez no tenía intenciones de persistir en el asunto.

Israel reflexionó y llamó a las personas que había enviado a Ciudad Baylon.

"No hagan que todo salga demasiado fácil, dejen que la secretaria Fermínez se encuentre con algunos obstáculos ... Pero vigílenla, no dejen que salga herida", dijo serio.

La otra parte estuvo de acuerdo, aunque confundida.

¿No vinieron aquí para ayudar a la secretaria Fermínez y al Sr. Alarcón?

¿Por qué hacer que la secretaria Fermínez encuentre más problemas entonces?

¡Era realmente difícil entender lo que pasaba por la mente del jefe!

Israel colgó el teléfono, sintiéndose un poco mejor.

Cuando Leticia se de cuenta de lo difícil que es el mundo, naturalmente recordará lo fácil que era vivir a su lado.

Ah, sí ...También debía buscar una buena casa de reposo para Ourenca.

Leticia seguía llamando a su abuela en sueños, seguramente la extraña.