Un Matrimonio por Dulce Amor romance Capítulo 111

Una vez que el Gerente Fang dijo esto, Xi Xiaye frunció el ceño: —Anteriormente, cuando estábamos planeando las cosas, ¿no se acordó que los medios y los reporteros serian rechazados? ¿Cuál es el problema?

Xi Xiaye entendió la preocupación de Liu Peilian.La razón por la que rechazaron a esas personas fue porque les preocupaba que los medios fueran imprudentes y simplemente escribieran sus historias.Anteriormente, después de organizar las celebraciones del aniversario durante varios años, los medios de comunicación habían exagerado acerca de Glory World y eso hizo que el antiguo Presidente, Mu Yinan, se sintiera muy infeliz.Después de eso, el Departamento de Relaciones Públicas canceló todas las invitaciones a los medios de comunicación.

—Esta vez es diferente. La compañía ha invitado a varias celebridades de la lista A para apoyar el evento. Creo que tal oportunidad debería ser usada adecuadamente— explicó el Gerente Fang.

—Incluso si queremos usarlo, no podemos hacerlo en éste aniversario. Sabe que al Presidente Mu no le gustan los medios y los periodistas. Si lo enfurecemos, ¿de qué sirve organizar este aniversario? —el gerente Fang acababa de terminar cuando Liu Peilian no pudo evitar hablar alto para refutar.

Xi Xiaye frunció un pocoel ceño. Lo pensó por un momento, y luego dijo:—¿Por qué no elige una o dos grandes empresas de medio y deja que hagan un reportaje exclusivo? Cuando terminen de redactar, deje que el Presidente Mu lo revise personalmente. Si el Presidente Mu lo aprueba, entonces pueden publicarlo.

Los ojos del gerente Fang se iluminaron instantáneamente: —Pero tenemos que garantizar que al final el Presidente Mu...

Antes de que el gerente Fang pudiera terminar, Xi Xiaye ya la había interrumpido y había hecho la vista gorda a la oscura mirada de Liu Peilian: —No se preocupe. Ustedes concéntrense en contactar dos entidades mediáticas confiables, déjenme el resto a mí—repentinamente se giró para irse, haciendo que Liu Peilianobservara todo esto con los dientes apretados.

Dio una vuelta y simplemente comprobó la situación en el lugar. Cuando regresó al salón, los asientos ya estaban casi llenos. Aparte de las pocas mesas centradas adelante para los invitados importantes, casi todos los demás habían llegado.

Los Vicepresidentes y Directores de la Corporación GloryWorld, y algunos de los pilares de la empresa, incluidos los que habían sido trasladados al extranjero, todos se habían apresurado en regresar. Algunos hombres apuestos de pelo rubio yojos azules. Los chicos guapos estaban sentados en las pocas mesas en el medio. Eran el grupo de expertos de élite de GloryWorldCorporation.

—Eh, Directora Xi, ¿por qué sigue aquí? ¡El Vicepresidente Liu y el Vicepresidente Zhang han estado buscándola por todas partes! ¡La mayoría de los invitados han llegado! ¡El evento está a punto de comenzar!

Xi Xiaye acababa de regresar al salón cuando su asistente, Xiao Mei, jadeaba mientras corría.

—Vamos.

Xi Xiaye ya había visto a Liu Lingyu, Zhang Lan, y al resto charlando con la alta dirección de GloryWorld, así queapuró su paso y se acercó.

—¡Vicepresidente Liu, Vicepresidente Zhang!

—Directora Xi, ¡está aquí! Sólo la estábamos esperando. Tomemos asiento.

Liu Lingyu vio que Xi Xiaye había llegado e inmediatamente sonrió cordialmente, con un aura de amabilidad: —Has estado de permiso por bastantes días. ¿Cómo está tu salud?

—Gracias por tu preocupación. Estoy bien.

Xi Xiaye se sentó. Su asiento estaba cerca de Liu Lingyu.

—Eso es genial. Además, te veías muy pálida. Pensé que era porque estabas muy ocupada con el trabajo y habías caído enferma, eso sería malo. Cierto, el asunto de la compañía entrando en la industria del espectáculo...

Liu Lingyu era alguien muy apasionado por el trabajo.En ese momento, no se olvidó del trabajo.

Xi Xiaye asintió ligeramente al camarero que había ido a servirle el agua. Entonces, se volvió hacia Liu Lingyu y sonrió: —No se preocupe, Vicepresidente Liu.El Presidente Mu me ha informado al respecto.Siéntase libre de hacerme saber cuándonecesite

¡Era Xi Xinyi!

Vio que llevaba un vestido fresco, blanco y largo, con un hermoso y brillante chal del mismo tono.Su pelo largo y dorado claro caía sobre sus hombros, e incluso había algunas perlas rosadas y pequeñas flores de colorclaro adornando su cabello.Su piel era tan blanca como el jade y su hermoso rostro sólo tenía un ligero maquillaje con una sonrisa dulce moderada y generosa.Elevaba un collar de perlas grueso en el cuello.Con su agraciada figura envuelta en ese sencillo y elegante vestido blanco, parecía un tierno ángel.

Si no fuera por el hecho de que había experimentado todo lo que ella era, Xi Xiaye pensó que probablemente se conmovería al verla entrar de una manera tan impresionante.

Cuando la vio sonreír y saludar gentilmente a la multitud a ambos lados, parecía como que la gente estaba viendo un concierto mientras chillaban deleitados.

En ese momento, Xi Xinyi tenía la atención de todos. Cada mirada y sonrisa hacía que todos se enamoraran de ella. Ese encanto era algo que ella, Xi Xiaye, no podía poseer.

De repente pareció entender por qué Han Yifeng la abandonaría y se enamoraría de Xi Xinyi.

Xi Xinyi era actualmente el sol que brillaba con diez mil rayos de luz. Ella existía como la diosa más hermosa en los corazones de todos, mientras que ella, Xi Xiaye, parecía ser la estrella más lejana en el solitario cielo nocturno. Ella sólo podía ver ese planeta desde lejos, parpadeando con una luz tenue...

Sin embargo, parecía que ella y todos los demás ya habían olvidado que la estrella parpadeante en el cielo nocturno podría ser en realidad más deslumbrante que el sol.Simplemente estaba demasiado lejos y escondida demasiado profundo, así que otros siempre descuidaron ese rayo que tuvo que viajar a través de muchos años antes de que pudiera brillar en la Tierra...

Ella no había entendido ese razonamiento hasta mucho más tarde cuando cierta persona le había susurrado al oído:—Señora, mientras que hay muchas estrellas que son más deslumbrantes que el sol en este vasto universo, descubrí una estrella como tú.

Al recordarlo y pensar en ello, no pudo evitar darse cuenta de que los ojos se le habían llenado de lágrimas.