Unidos por la abuela romance Capítulo 145

Todo el vecindario sabía lo unidas que eran las hermanas.

Lilia había ocultado el asunto a su hermana para ahorrarle preocupaciones.

"Gracias, Sra. Paloma", le agradeció Celestia antes de continuar caminando rápidamente hacia el edificio residencial de su hermana mientras arrastraba a Gerard.

"Mi cuñado se enojó porque mi hermana no le había cocinado el almuerzo cuando la dejé el otro día. Hernesto parecía querer golpear a mi hermana, pero borró esa expresión de su cara cuando me vio", balbuceó Celestia a Gerard.

"¿Por qué mi hermana no me dejó saber?"

Celestia se sentía mal por su hermana. Las mujeres obtienen una segunda oportunidad en la vida cuando se casan. La segunda oportunidad en la vida de su hermana no parecía ser fácil.

La actitud de Hernesto hacia Lilia cambió para peor en menos de tres años de matrimonio.

Gerard respondió firmemente: "Tu hermana no quiere que te preocupes. La Sra. Paloma dijo que tu hermana persiguió a tu cuñado por unas cuadras con un cuchillo. Significa que tu hermana tenía la ventaja. No te preocupes. Todo estará bien."

Era difícil para Celestia sacarlo de su mente.

Sin embargo, no profundizó más en el asunto con Gerard. Subió las escaleras con él y abrió la puerta con la llave que su hermana le había dado.

Lilia estaba cocinando en la cocina. Al detectar el sonido de la apertura de la puerta, pensó que Hernesto había llegado a casa. Recogió su sartén y salió de la cocina. No se detendría si Hernesto tenía el descaro de poner sus manos sobre ella de nuevo.

Hernesto no se había puesto en contacto con ella desde que regresó a casa de sus padres. Sin embargo, sus suegros habían bombardeado su teléfono con mensajes de odio y hablaban mal de ella en el chat grupal de la familia Castero. Sus suegros reunieron a otros parientes para acusar a Lilia de ser una mala esposa que merecía una paliza de su esposo.

En resumen, decían que se lo merecía. Hernesto no tenía la culpa. Ella era la culpable.

Algunos parientes mayores creían que tenían la autoridad para persuadirla de que se disculpara con Hernesto, diciendo algo sobre no irse a la cama enojada. No se trataba de una disputa sangrienta, así que no había necesidad de hablar de ello en el chat grupal de la familia.

Por supuesto, los parientes de Castero estaban del lado de Hernesto. Le aconsejaron que fuera comprensiva con Hernesto y que gastara menos dinero. Al parecer, Hernesto lo estaba pasando mal en el trabajo, así que era normal que tuviera un poco de mal humor cuando regresaba a casa. Se suponía que Lilia debía ser tolerante con sus cambios de humor.

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