Unidos por la abuela romance Capítulo 176

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Las cosas empezaban a ponerse interesantes.

Celestia no tenía ni idea de que su hombre le había ayudado a resolver otro problema en solo unos minutos.

Después de cocinar pasta, Celestia la sirvió junto con la salsa. También añadió trozos de panceta y albahaca, pero solo una pizca de chile en su plato. Fue un salpicado rápido, ya que Celestia temía que pudiera ser demasiado picante para ella.

Las estadísticas mostraban que a los habitantes de San Magdalena no les gustaba el exceso de especias en sus comidas.

"Sr. Castell, el desayuno está listo."

Celestia llevó su plato fuera de la cocina, mientras llamaba a Gerard, que estaba en el columpio, a la mesa.

Gerard no dijo nada, pero salió del balcón.

Al ver que su desayuno no estaba en la mesa del comedor, entró en la cocina y sacó su parte.

"Puedes añadir tanto chile como quieras. A mi hermana le encanta el picante, así que ella mezcla un montón de sabores picantes para hacer los suyos." Las hermanas tenían paladares bastante diferentes a pesar de compartir la misma madre. Celestia solía añadir una pizca de chile a su plato de pasta, pero la mayoría de las veces evitaba las especias picantes.

Su hermana amaba la comida muy picante. Vertía cantidades copiosas de chile en su comida, ya sea que complementara la cocina o no. Lilia tenía algunas macetas en su balcón, pero en lugar de flores, optaba por pimientos de todo el mundo que pudieran adaptarse a las estaciones de San Magdalena.

"No me gusta nada grasoso o picante."

Celestia levantó su barbilla y sonrió a Gerard. "Oh, no puedes comer comida grasosa y picante, ¿verdad? Tal vez debería añadir grasas y chile a la comida para que lo pruebes."

Gerard se quedó sin palabras.

Había dejado escapar sus pequeñas debilidades.

Celestia encontró a Gerard aburrido mientras este comía solemnemente con cara seria. Podía perder el apetito al tener comidas con él.

Sacando su teléfono, Celestia navegó por las noticias mientras disfrutaba de su desayuno.